La esposa del fallecido piloto de Lamia Miguel Quiroga, Daniela Pinto, dijo a la red de televisión Uno de Bolivia que su marido no era ningún monstruo.

"Que la gente entienda que mi marido no es ningún monstruo", dijo.

Según reportes, el avión que se estrelló la semana pasada cerca de Medellín, Colombia, en donde murieron 71 personas, entre ellos jugadores y entrenadores del equipo Chapecoense, así como periodistas, cayó por falta de combustible, lo cual habría sido responsabilidad del piloto.

Según el gerente de la línea aérea, Gustavo Vargas, la nave sí necesitaba de un reabastecimiento para realizar ese viaje.

"Dejen de atacar a mi esposo, que dejen de hablar de cosas que ni ellos mismos saben porque esas personas no se dan cuenta de que mi marido dejó hijos, quienes acceden a las redes sociales", agregó Pinto.

"Mi marido era un hombre bueno, un hombre noble, mi marido era capaz de sacarse la camisa por darle a alguien si necesitaba".

La pareja tuvo tres hijos, uno de ellos de sólo seis meses de edad.

Ayer, los fiscales allanaron la sede de la aerolínea boliviana en Santa Cruz y detuvieron a Vargas Gamboa, y confiscaron documentos y computadoras dentro de su investigación sobre la responsabilidad de la firma en el accidente.

Con información de Marca