En sólo unas cuantas vueltas, Checo Pérez rescató una carrera que parecía perdida y finalizó en el séptimo sitio, mientras que Lewis Hamilton aprovechó problemas de Nico Rosberg para ganar el GP de Singapur y tomar el liderato del Campeonato de Pilotos.

Para Esteban Gutiérrez las cosas no fueron nada agradables, pues sufrió su quinto abandono del año y terminó haciendo un gran berrinche al bajar del problemático C33 del equipo Sauber.

La carrera parecía ser desastrosa para Sergio, quien batalló en el primer juego de neumáticos para superar al Sauber de Gutiérrez, después la estrategia lo mandó muy atrás y para colmo sufrió un contacto con Adrian Sutil, que le hizo perder el ala delantera en la vuelta 29.

No obstante, eso provocó el ingreso del safety car, lo que permitió modificar la estrategia y seguir luchando, de tal forma que prepararon una detención más en la parte final de la prueba para salir con gomas frescas, situación que el jalisciense aprovechó de gran forma para recuperar 10 puestos en las últimas cinco vueltas de la carrera, la cual se terminó por el límite de las 2 horas y no por cumplir con las 61 vueltas pactadas.

Con este resultado, Checo subió al décimo sitio del Campeonato, terminó por delante de ambos McLaren y permitió a Force India tomar el quinto puesto entre los Constructores, pero lo más importante es que ayudó al equipo indio a completar la mejor temporada en su historia dentro de la máxima categoría. Su coequipero Nico Hulkenberg también sumó, pero cerró noveno.

"Excelente resultado, fue una carrera en la que me pasó de todo, cuando se veía totalmente perdida, pero nunca nos rendimos", dijo Checo a Fox Sports.

Para Hamilton las cosas fueron muy sencillas hasta que el ingreso del SC cambió las estrategias a su alrededor. Cuando el SC se fue en la vuelta 37, el británico debía pensar en hacer una parada más en los fosos para colocar el compuesto blando de Pirelli, mientras sus competidores irían hasta el final.

Hamilton construyó una ventaja de 25 segundos, los cuales se esfumaron cuando ingresó a pits, siendo superado por Sebastian Vettel, no obstante, las gomas del Red Bull del alemán no dieron para más y de inmediato el inglés recuperó la punta para llegar hasta el final y llevarse la séptima victoria del año.

El podio lo completaron Vettel y Daniel Ricciardo, seguidos de Fernando Alonso y Felipe Massa.

Por su parte Esteban, habló de su frustración tras el abandono de la prueba.

"Es una reacción que es natural, es imposible hacer un buen resultado de esta manera, trabajas de alguna forma para encontrar perfección lo logras y con estos problemas se vuelve imposible hacer un resultado", expresó el piloto de Monterrey.