La caravana ciclista urbana más grande de la historia de Nuevo León se alzó ayer en una sola voz exigiendo respeto y la creación a corto plazo de espacios seguros para la práctica de su deporte.

Unas 2 mil personas montaron su bicicleta y rodaron del Auditorio San Pedro al Parque La Huasteca, donde realizaron un acto en honor a Mónica Salinas de Vergara, que falleció el pasado 20 de septiembre al ser arrollada por un tránsito ebrio.

Triatletas, trotadores y ciclistas de todas las modalidades solicitaron a las autoridades y automovilistas mayor seguridad en el área metropolitana, además de crear carriles especiales y reactivar la ciclopista del Río Santa Catarina, que desapareció tras el huracán "Alex" del 2010.

Peatones, familias desde sus casas y conductores fueron testigos de la ola ciclista, donde igual se pudo ver al triatleta internacional Francisco Serrano, a la olímpica Ingrid Drexel y al ex ciclista profesional Raúl Alcalá, entre otros.

"Hay que seguir rodando", expresó Serrano, vocero del contingente, "porque todos disfrutamos de este deporte que tanto amamos.

"A todo mundo nos gusta mucho la bicicleta y disfrutamos al salir, pero también queremos estar en un entorno seguro", dijo.

Los asistentes colocaron una bicicleta blanca en el lugar del accidente en La Huasteca y sembraron un árbol, que simboliza la semilla de una nueva cultura vial.