En una de las mejores exhibiciones de los Tigres en el torneo, la afición auriazul no logró consumar las emociones con un final feliz porque entre Santos y una decisión polémica del árbitro lo impidieron.

Por tratarse de un martes, el Estadio Universitario se fue llenando hasta iniciado el partido, un duelo regional que ofreció espectáculo para los presentes con dos equipos explosivos de medio campo hacia el frente.

Además, fue una noche de golazos. Primero Javier "Chuletita" Orozco enfrió el Uni con una vistosa palomita que llegó de una lujosa individualidad de Darwin Quintero para el 1-0 del Santos.

Pero el gol lagunero no pegó en el ánimo del equipo que le devolvió la sonrisa a sus aficionados con un golazo de Gerardo Lugo tras un pase de un inspirado Joffre Guerrón.

Con el 1-1, los Tigres se volcaron sobre la meta rival y encontraron el segundo gol, pero un "mal ojo" de los árbitros anularon la anotación de Hugo Ayala por una supuesta mano de Guerrón que no existió.

El árbitro ya había marcado la anotación, pero su juez de línea le comunicó que Guerrón metió la mano.

Al final, entre el poste y un atajadón de Nahuel Guzmán salvaron a Tigres, que fue aplaudido por su afición, pero se retiró con la duda de saber si fue mano o no de Guerrón.