| | Damián Álvarez ya sabe lo que es hacer gol en el Monumental, sólo que ahora intentará hacerlo como rival.
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| | Javier Saviola, de 33 años y quien milita en el Verona italiano, fue compañero del "Enano", de 35 años.
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| | Varios de los compañeros de Damián en River, ya son técnicos, como Eduardo Coudet, en Rosario Central.
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| | Damián Álvarez llegó a River Plate desde los 8 años de edad y ahí debutó en la Primera División.
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En los Tigres todos quieren jugar contra River Plate, pero para alguien será un momento monumental.
Se trata de Damián Álvarez, quien por primera vez enfrentará al equipo de sus amores como rival en la cancha que lo vio nacer como futbolista, la del Estadio Monumental.
"¿Sabés qué pasa? Él empezó ahí a los 8 años, era un pibe. Jugaba al 'baby fútbol' y lo llevó un tipo, Arce, a probarse. Y quedó. No me olvido de que le tuvimos que hacer un tratamiento para que creciera más", le recuerda a CANCHA el padre del "Enano", Alberto.
"Tuvimos que ir al centro para conseguir una sustancia médica especial, se preparaban en una droguería. Le dieron eso, como le pasó a Messi, jaja", bromea.
Y su chiquilín creció, más en lo futbolístico que en lo físico, claro está.
"Ya desde ese momento decía que más de 1.68 ó 1.69 no iba a medir. Pero viste que Damián siempre fue robusto, de buen físico, privilegiado. Y así sigue jugando", cuenta Alberto sobre su hijo, ahora de 35 años.
UNA NOCHE ESPECIAL Los Álvarez se preparan para una noche muy especial: la de Damián en el Monumental, ese estadio que conoce como pocos. Ahí jugó con grandes como Javier Saviola, a quien vio debutar. Con Ariel Ortega y hasta con el propio Marcelo Gallardo, hoy entrenador.
"Lo primero que se me cruza por la cabeza son los títulos que pudimos conseguir con Ramón (Díaz) y el Tolo (Gallego), también haber jugado con cracks increíbles como Gallardo, Aimar, Saviola, Astrada... Muchos me cargan porque algunos ya no juegan más.
"Gallardo es unos cuantos años mayor que yo, y cuando empecé a pisar vestuario ya era jefe, era el 10 del equipo y había otros monstruos que nos hicieron mamar (aprender) ciertas cosas. Fuimos compañeros y son lindos recuerdos", recuerda el volante de Tigres.
ES HINCHA DE RIVER En Buenos Aires lo espera una banda para acompañarlo al estadio: "Mi hija, su yerno, los sobrinos somos como 15", explica el padre orgulloso de su hijo, que anda en permanente contacto por el radio.
"Va a ser muy especial para todos. Desde mi lugar, me voy a poner contento si le va bien a Damián. Y si gana River, tendré que ponerme feliz por eso, porque soy muy hincha".
Cuando dice hincha, significa fanático. Como Damián, quien está en pareja con la misma mujer de cuando empezaba a jugar y tiene dos hijos mexicanos, lo es de River.
"Él cuando perdía el equipo se volvía loco. Si hasta sé que lloró en México cuando el equipo se fue al descenso", revela el Álvarez mayor.
"Así que ahora no sé cómo va a reaccionar enfrentándolo, será muy especial, seguro", agrega. Porque, como cuenta bien Damián y aclara, "sigo siendo hincha y hasta sigo guardando una camiseta que me dio Ortega cuando hace años vino a jugar contra el América.
"El sentimiento nunca se pierde, jugué en ese estadio y con esa gente Para todos los comienzos son los más recordados, siempre mi devoción fue River, de chico iba a ver al Enzo y es una identificación que no se va a perder nunca. Y cuando veo los partidos, siempre pensaba en qué lindo sería volver a pisar esa cancha con el estadio lleno". |