El Manchester United (sexto) salvo un punto en extremis en su visita a la cancha del West Bromwich (décimo cuarto), que se adelantó en dos ocasiones, este lunes en el partido que cerraba la Jornada 8 de la Liga Premier.

El francés Stéphane Sessegnon adelantó a los locales en el primer tiempo (8'), el belga Marouane Fellaini empató al inicio del complemento (48'), pero el West Brom volvió a adelantarse con un tanto de Saido Berahino (65') y el United sólo pudo empatar a tres minutos para el final con un gol del holandés Daley Blind.

Con este empate, el Manchester United se queda con 12 puntos, en la sexta posición del campeonato inglés, a 10 del líder Chelsea.

Con la ausencia de Wayne Rooney y con el colombiano Radamel Falcao en el banquillo, el argentino Ángel di María y el holandés Robin van Persie estaban llamados a ser decisivos, pero se mostraron totalmente inofensivos. El "Fideo" acabó siendo sustituido por Ashley Young a un cuarto de hora para el final.

Falcao sustituyó al español Juan Mata en el segundo tiempo (72'), pero tampoco resultó decisivo.

El United, que podía encadenar su tercera victoria consecutiva por primera vez en 2014, continúa con su irregular bajo la batuta del holandés Louis van Gaal, quien llegó al banquillo al inicio de la presente temporada.

Los Diablos Rojos, que no participan esta temporada en Europa, solo han ganado tres partidos de los ocho disputados en el campeonato y llevan sin ganar seis partidos consecutivos fuera de casa, unos números que el United no conocía desde hacía 18 años.

"Estoy muy decepcionado porque hemos jugado nuestro mejor partido de la temporada y el resultado no es suficientemente bueno", declaró Van Gaal tras el partido.

"Podíamos haber ganado, pero eso no cuenta en nuestro mundo. Es una pena porque podíamos haber tenido un nuevo inicio (de trayectoria) de haber ganado", añadió.