A Yimmi Chará le llegó el futbol como una herencia y junto a sus hermanos han creado prácticamente una dinastía.

Su padre, Jesús Henry Chará llegó a ser un jugador destacado a nivel amateur y aunque no logró jugar profesionalmente, su gusto por el deporte sirvió como ejemplo para que Yimmi y sus hermanos mayores Luis Felipe y Diego jugaran desde chicos.

Yimmi empezó a los seis años, cuando Luis Felipe ya era adolescente y Diego empezaba a tomar en serio el futbol.

Actualmente, los tres son jugadores profesionales y permanecen activos. Luis Felipe, de 31 años de edad, juega en el Aragua de Venezuela y Diego, de 28, está en el Portland Timbers de Estados Unidos, mientras que Yimmi fue presentado ayer con los Rayados.

"Me gusta ganar, el reto o uno de los objetivos es ser campeones, vamos a trabajar para ello", dijo el menor de los Chará con 23 años de edad.

"Sabemos que no es un torneo fácil, pero han llegado muy buenos jugadores, venimos a aportar a que con la base que el profe tiene y nosotros podamos hacer un grupo unido, un grupo que quiera el mismo objetivo".

Luis Felipe llegó a ser seleccionado juvenil de Colombia y participó en el Torneo Esperanzas de Toulon. Después hizo carrera en el Deportivo Pereira, el Atlético Nacional y el Deportivo Cali antes de partir a Venezuela.

Diego, por su parte, jugó en Quindío, América de Cali y Deportes Tolima, antes de emigrar a Estados Unidos.

Además del futbol, Yimmi también heredó el peinado, una tradición familiar que los ha caracterizado durante años.

"Es un peinado característico de mi familia, mis hermanos, muchos familiares se lo han hecho, por ahí viene el estilo. El peinado me lo hace mi esposa, me gusta, me siento bien con él y espero que la gente me pueda conocer", comentó.