La afición sufre para entrar al Jalisco
Carlos Rubio México, Guadalajara (26 enero 2015)
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  • El perímetro de seguridad provocó que la entrada al estadio fuera complicada.
    FOTO: Jorge Armando Moreno Almanza
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  • Lente de Cancha: UdeG vs. Chivas
    Los Leones Negros y el Rebaño hicieron fiesta en el Estadio Jalisco.

"Mi casa ya no es tu casa".

El mensaje de los Leones Negros para las Chivas quedó muy claro ayer en el Estadio Jalisco.

Porque para entrar, la afición de las Chivas vivió un calvario digno de cualquier visitante que se mete a la casa del rival.

"¿Toda esta fila es para entrar a palcos?", "¿Si vengo a la Zona B tengo que entrar por aquí?",

"Oye, pero yo tengo tarjetas". Ninguna petición era atendida y la confusión reinó en los accesos al estadio; al menos los de las Chivas ya no escucharon un "pásale, estás en tu casa".

Las horas previas al juego hacían esperar el lleno, pues en la semana el boletaje se agotó y, pese a las trabas, la mayoría de la afición fue rojiblanca, pero sorpresa se encontró cuando llegó al que antes fue su estadio.

El cerco de seguridad para evitar desmanes de los grupos de animación de las Chivas también perjudicó a los aficiones comunes, a las familias y quienes antes entraban como Pedro por su casa.

Las filas comenzaron a crecer y, conforme se acercaba el silbatazo inicial, las cosas se complicaban. Los aficionados se acercaban a los policías con la esperanza de que los dejaran pasar por la reja que colocaron antes de llegar a los accesos, pero la respuesta fue negativa.

"Como nunca se llena, cuando viene gente no saben qué hacer", gritó molesto un aficionado de las Chivas, mientras, otros intentaban que los dejaran pasar a su palco y evitar la revisión exhaustiva del dispositivo de seguridad.

Cuando los Leones Negros movieron el balón, las filas aún eran largas y el partido inició con tres cuartos de la capacidad del estadio, pues la afición aún trataba de descifrar la manera de entrar.

Pero en la confusión también los locales vivieron su viacrucis. El cerco de seguridad en los cuatro puntos de acceso no hizo distingo.

Cuando cayó el gol de Fidel Martínez, los gritos de "¡UdeG, UdeG!" hicieron dudar si en realidad la mayoría era rojiblanca.

Pero Omar Bravo explotó en júbilo con el gol del empate y el grito de la afición retumbó en el Jalisco. Entonces ya no quedó duda de que sigue siendo casa de las Chivas.

Extrafutbol
LO QUE SE VIO
- Al minuto 20 del partido comenzó a llover sobre el Jalisco, misma que cedió al medio tiempo.
- A un grupo de niños con camisetas blancas y una leyenda de la Madre Teresa de Calcuta, entrar a la cancha y formar circulo en el centro para soltar palomas blancas.
- Al ex-jugador de Chivas y Leones Negros Fernando Quirarte, saludar al ex candidato local a la alcaldía de Guadalajara, Leobardo Alcalá, fuera de la puerta 14 del Jalisco.
- A Carlos Salcido, Jair Pereira y Omar Bravo tener un diálogo con el árbitro Francisco Chacón, antes de iniciar el segundo tiempo.
- Marcelo Alatorre arengó a la gente a apoyar al 56 cuando iba a realizar un saque de manos.

LO QUE SE OYÓ:
- "No se oye.. No se oye", gritaban los aficionados de Chivas a los de Leones, cuando intentaban hacer el coro para meterse con el portero Luis Michel en los despejes.
- "¿No habría manera de que empataran 3-3 hoy?", le sugirió Leobardo Alcalá, ex político tapatío, a Fernando Quirarte al saludarlo antes del partido.
- "Esa defensa de Chivas, te juega, te defiende y siempre la calabacea en una y cuesta el juego", le dijo un aficionado de la Zona B de Chivas al ex jugador Francisco Gabriel de Anda, quien estaba de analista en el palco para ESPN.
- "¿Quién es su padre, quién es el papá", gritaba Bravo mientras celebra a el gol hacia la tribuna preferente al 83'.

Hora de publicación: 00:30
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