La reunión de dueños de clubes de la Liga Mexicana de Beisbol se convirtió ayer en "una cena de negros" y el resultado es que la temporada 2017 ahora corre más riesgo de llevarse a cabo con 8 y no con 16 clubes.

El otro escenario que se desprende tras la junta en la Ciudad de México que duró casi seis horas es que la fractura de ayer desencadene en la formación de dos Ligas con ocho equipos, que estaría sujeta al pirateo de peloteros al mejor postor.

Por un lado, el grupo formado por Sultanes, Diablos Rojos, Tigres, Oaxaca, Campeche, Saltillo, Tabasco y Durango desconoció el acuerdo de Asamblea de jugar la campaña 2017 sin límite de mexicanos nacidos en el extranjero y acordó por mayoría participar con seis extranjeros, tres "pochos" y dos novatos en un roster de 30 peloteros.

Apenas en diciembre pasado ambas partes parecían llegar a un acuerdo estableciendo un límite de 9 méxico-americanos, 6 importados y 2 novatos, pero el grupo encabezado por Tijuana lo rechazó.

Ante la posibilidad de que se formen dos circuitos y los jugadores acepten contratos al mejor postor, el dueño de los Sultanes, José Maiz García, dijo que su grupo estaba listo para encarar lo que venga.

"Que venga la guerra, estamos listos para la guerra", reiteró el propietario del club regio, quien se mostró confiado en que aún con ocho participantes la temporada será un éxito y arrancará el 31 de marzo.

Encabezados por Alejandro Uribe, hijo del dueño de los Toros de Tijuana, el bando de la "nueva generación" de clubes llegó a la reunión acompañado por un par de abogados, quienes ya planean la estrategia jurídica para revertir los hechos de ayer.

"Esta Asamblea no tiene validez, iremos a los juzgados y hasta las últimas consecuencias", advirtió José Antonio Mansur, dueño de los Rojos del Águila de Veracruz, que están unidos a Tijuana, Yucatán, Laguna, Puebla, Monclova y Aguascalientes.

El encuentro celebrado en un hotel de la Ciudad de México provocó también un damnificado, Plinio Escalante, a quien corrió el grupo de la "vieja guardia" por tomar supuestamente acciones en favor del grupo de la "nueva generación".

"No regreso porque no me gusta ver cómo se pelean allá adentro", declaró Escalante, quien aclaró que no renunció y ahora dejará su contrato de dos años en manos de sus abogados.

La plaza de Reynosa, que iba a ser vendida a León, quedó descartada para este año "por no presentar su documentación en regla", externó Maiz García, quien tras la salida de Escalante del salón se quedó al frente de la junta.

El último round será en una junta en febrero.

LA DIVISIÓN
Así están conformados los grupos antagonistas en la Liga Mexicana de verano:

LA VIEJA GUARDIA
Sultanes
Diablos Rojos
Tigres
Saltillo
Campeche
Tabasco
Oaxaca
Durango

LA NUEVA GENERACIÓN
Tijuana
Laguna
Yucatán
Puebla
Monclova
Veracruz
Aguascalientes

EN EL AIRE
Reynosa (León)


Asegura Mansur que Plinio está 'out'

Para ocho equipos de la Liga Mexicana de Beisbol, Plinio Escalante está fuera de la presidencia del circuito.

El presidente ejecutivo de los Diablos, Roberto Mansur, expuso que ocho novenas solicitaron la renuncia de Escalante Bolio, y al salirse éste de la Asamblea de Presidentes, la vacante de jerarca en la LMB se abrió.

"Consideramos y analizamos la falta de interés de él en el último par de años, primero por un problema familiar que se entendía, pero después de eso, mayor tiempo se la pasaba en Yucatán y no en la oficina de la Liga.

"Se le pidió y él ahí mismo dijo que se retiraba, se retiró de la Asamblea. Para su liquidación, eso lo tendría que ver el ingeniero Maiz, poner las personas indicadas", explicó el directivo a CANCHA.

Mansur Galán detalló que ante la salida de Plinio Escalante de la reunión, el Presidente de Sultanes, José Maiz, encabezó la junta por lo que las decisiones tomadas en ella se mantendrían.

- ¿Ven como renuncia que Escalante haya dejado la Asamblea?
"Sí, él ya quedó fuera de la Liga, no se reinstaló el consejo y como el último que había lo presidía el ingeniero Maiz, él terminó como moderador de la Asamblea y terminamos", añadió.