Chávez lamentó la delincuencia en México. FOTO: Archivo

Tras el homicidio de su hermano, el ex boxeador mexicano Julio César Chávez dijo que todos los secuestradores, violadores y asesinos deberían ser quemados vivos.

"Si yo fuera Presidente de la República o Gobernador yo hubiera implantado una ley de a todos los secuestradores, a todos los violadores, que les dieran pena de muerte, que los quemaran vivos frente a toda la sociedad para que fuera un escarmiento para todos esos cabrones, rateros, matones, que se dedican a quitar vidas inocentes", comentó Chávez en conferencia.

"Todos corremos peligro, pero la vida tiene que seguir, esto no fue una venganza, fue un pinche ratero. No es un ataque a la familia Chávez, que quede bien claro.

"Yo quisiera que nos uniéramos todos y esta clase de gente, violadores, que te matan a sangre fría, de qué te sirve meterlos a la cárcel, si salen a los dos o tres meses, eso no, sería con todo respeto quemarlos vivos delante de toda la gente para que sufrieran los cabrones y no volvieran a cometer esas pinches pendejadas".
 
"El César del Boxeo" afirmó que son dos los implicados en el homicidio de su hermano.

"El que disparó fue uno. Uno se quedó afuera y el otro entró. Hay seguimiento, pero no les puedo decir más", señaló.

El ex campeón mundial confió en que el asesino esté tras las rejas y advirtió que se encargará de que nunca salga de prisión.

Rafael Chávez fue asaltado en su domicilio el domingo, informó la Fiscalía General del Estado.

De acuerdo con las primeras investigaciones, el también ex pugilista fue ultimado la noche del domingo cuando dos personas ingresaron a su casa para robarlo.