Leo Valadez resolvió las exigencias que le presentó el toro y logró lucir por momentos ante la mirada de los empresarios de la Plaza México. FOTO: Guillermo Leal

Aunque no fue de luces, ayer Leo Valadez hizo su debut oficial en la Plaza México, donde el domingo cumplirá un sueño: confirmar su alternativa.

"Esto fue una experiencia que me sirve mucho para que no me impresione tanto esta plaza, que es única y especial", dijo el matador aguascalentense, entrevistado en el patio de cuadrillas de la Monumental Capitalina.

Valadez, quien confirmará la alternativa que el 10 de octubre tomó en Zaragoza, España de manos, ni más ni menos, que de Joselito Adame, la figura mexicana, toreó un astado de Bernaldo de Quirós a manera de preparación ayer en el ruedo de la Plaza México, que pisó por vez primera.

"Creo que soy un torero que puede gustar. Dios quiera que me salga un toro que me permita expresar.

"Ayer (domingo) estuve en la corrida y sólo de ver la plaza casi llena y escuchar los 'olés' del público, se me incrementaron las ganas de que llegue el domingo, una fecha soñada".

Leo Valadez, que tiene 20 años, se fue desde hace siete a España, en donde prácticamente hizo toda su carrera novilleril hasta convertirse en matador de toros.

Esta semana la dedicará a prepararse de la mano de su representante, el matador Alfredo Gutiérrez, en diversas ganaderías.


¡Sorpresa!

La felicidad de Leo Valadez tras su primera faena en la México se incrementó cuando, en la entrada, se topó con su padrino, Joselito Adame, quien toreó el domingo.

Recordaron que Joselito lo vio torear por primera vez hace 11 años en Ojuelos, Jalisco y, hace poco más de un mes, le dio la alternativa.

"Yo sólo te pido que disfrutes la tarde del domingo", le dijo Joselito a Leo, quien le respondió que la primera vez que vio toros en la Plaza México fue el día que Adame confirmó su alternativa (2009).