• El mexicano sigue preparándose con su nuevo equipo. FOTO: AP

Adrián González no se quedó con los brazos cruzados, tras la lesión que provocó que perdiera gran parte de 2017, y trabajó de forma distinta para tratar de reivindicarse esta temporada.

El primera base mexicano, que firmó con los Mets por una campaña, dejó de lado el trabajo con pesas en el gimnasio e incluyó en su preparación mucha terapia física, estiramiento y hasta Pilates.

"Muchas de las cosas que estaba haciendo, especialmente, por el lado de las pesas, eran malas para mi espalda. Este invierno hice los mismos ejercicios y todas las cosas que le dicen a una persona que está tratando de regresar de una operación", reveló González en entrevista con CANCHA.

El "Titán" no quiere que le pase como a otros deportistas y le da a su cuerpo un tratamiento especial antes de cada juego de pretemporada. Calienta, se estira, recibe un masaje y realiza trabajos para fortalecer el abdomen y la espalda baja, donde tuvo su problema, todo, antes de las prácticas de bateo y fildeo de rutina con el resto de sus compañeros.

"Ahora tengo que llegar mínimo dos horas antes de que tenga que estar en el campo para hacer todos mis ejercicios, estiramientos y masajes", aseguró, quien sólo disputó 71 duelos la temporada anterior.

"Aquí tenemos un ejemplo muy grande en David Wright, que tiene problemas de espalda y no los ha podido superar. La espalda es lo más difícil, es lo que más limita a un deportista y el año pasado lo sentí. Para mí es un borrón y cuenta nueva, y ojalá pueda mantenerme bien de salud".

González, quien cumplirá 36 años en mayo, está consciente de su edad y acepta su rol de mentor con su nuevo equipo, así como lo hizo con los Dodgers por seis de los 14 calendarios que tiene en Grandes Ligas.

"La experiencia te da mucho. A lo mejor no tienes las mismas facultades que de joven, pero conoces más, tienes mejores instintos y las cosas vienen un poquito más fácil", enfatizó.