En la séptima, Eduardo Núñez conectó cuadrangular con dos en base y Boston amplió la ventaja 8-4. FOTO: AP Una vez más, Clayton Kershaw quedó a deber en Playoffs. FOTO: EFE Julio Urías subió a la lomita y cumplió. FOTO: AP

El fantasma de Kirk Gibson se apareció en Fenway Park, pero esta vez jugó en contra de los Dodgers.

Eduardo Núñez conectó un jonrón de tres carreras como emergente en el fondo del séptimo inning para ayudar a que los Medias Rojas vencieran 8-4 a Los Ángeles y tomaran ventaja de 1-0 en la Serie Mundial.

El dominicano se convirtió en el primer bateador que viene desde la banca y la saca del parque en un Juego 1 del Clásico de Otoño, desde que Gibson conectó aquel memorable palo de vuelta entera en 1988, con el que los Dodgers vencieron a los Atléticos y se encaminaron a su último título de las Grandes Ligas.

Con dos outs en la séptima entrada y Boston en ventaja 5-4 en la pizarra, Núñez aprovechó una curva de Alex Wood y la depositó detrás del "Monstruo Verde", ante la algarabía de los aficionados, que aprovecharon la emoción para gritar: "¡Los Yanquis apestan! ¡Los Yanquis apestan!".

En su tercera apertura en Serie Mundial, Clayton Kershaw toleró 5 carreras en 4 capítulos y sufrió la derrota. Su contraparte, Chris Sale, tampoco sobrevivió al quinto rollo y aceptó 3 rayitas en 4 episodios. Matt Barnes se apuntó la victoria, con un inning en blanco.

Los patirrojos fabricaron dos carreras en la misma primera entrada, gracias a sencillos remolcadores de Andrew Benintendi, quien conectó cuatro hits y anotó tres veces en el juego, y J.D. Martínez.

Matt Kemp acercó a Los Ángeles con cuadrangular solitario en la segunda y Manny Machado, con imparable productor en la tercera, empató los cartones, antes de que Martínez mandara a los locales arriba con doblete en el cierre del capítulo.

El propio Machado, quien agregó un elevado de sacrificio en el séptimo, igualó el marcador con una rola en el quinto rollo; sin embargo, Xander Bogaerts, con rola, y Rafael Devers, con sencillo, le dieron la ventaja definitiva a Boston en el fondo del inning.

Así como lo hiciera Fernando Valenzuela un 23 de octubre de 1981, Julio Urías, de 22 años, debutó en el Clásico y permitió una anotación en un inning de labor, en el que ponchó a dos. Se convirtió en el pitcher más joven de los Dodgers en lanzar en esta instancia desde "El Toro de Etchohuaquila", quien tenía 21.