Con la promesa de no olvidar y curar sus heridas con generosidad, Boston rindió un homenaje a víctimas, sobrevivientes y socorristas del atentado a su maratón el año pasado.

El ataque, que dejó 3 muertos y 264 heridos, también fue recordado en Washington, donde el presidente Barack Obama destacó "el increíble coraje y liderazgo de los bostonianos después de una tragedia horrible", según un comunicado de la Casa Blanca.

El 15 de abril de 2013 dos bombas artesanales presuntamente fabricadas por los hermanos de origen checheno, Dzhokhar y Tamerlan Tsarnaev, explotaron cerca de la línea de la meta del maratón más antiguo del mundo.

Unas dos mil 500 personas asistieron con invitación a la ceremonia en el Hynes Convention Center, ubicado cerca de la meta del maratón del año pasado.

Al acto, que inició con la colocación de una ofrenda floral en el lugar de las explosiones, acudieron los familiares de las tres víctimas fatales del atentado, así como los de un policía del Instituto de Tecnología de Massachusetts que falleció en un tiroteo durante la investigación.

El gobernador Deval Patrick, el alcalde Martin Walsh y el cardenal de Boston Sean O'Malley también estuvieron en la ceremonia celebrada bajo una lluvia ligera en medio de música de gaitas.

Entre los sobrevivientes que hablaron estuvieron el recién casado Patrick Downes y la bailarina Adrianne Haslet-Davis, quienes perdieron la parte baja de sus piernas izquierdas debido a las bombas.

A las 14:49 locales, hora exacta de los atentados, repiquetearon campanas de iglesia y se izó una bandera estadounidense.

Este año el maratón de Boston se celebrará el lunes 21 de abril. Heather Abbott, a quien le amputaron un pie, irá a apoyar a Erin Chatham, una mujer que le encontró en el suelo.