Rayados tuvo un sábado de gloria y espera que hoy sea un domingo de resurrección, luego de golear anoche 4-1 al Veracruz, el día en el que Humberto Suazo llegó a los 100 goles en México y mantuvo viva la posibilidad de entrar a la Liguilla.

El resultado ante los jarochos puso al Monterrey con 20 puntos, con una diferencia de -1, y los tiene a un punto de zona de clasificación, en espera de vencer a las Chivas en la última fecha y varias combinaciones de resultados.

Hoy es clave que ni Chivas ni Xolos, ambos con 21 puntos, sumen, pues Rayados ya no los alcanzaría y las posibilidades de Liguilla disminuirían.

Ayer Rayados reaccionó a un inicio desafortunado por un gol de Alfredo Moreno al minuto 21, luego del cobro de un tiro libre que Suazo le desvió la trayectoria para dejar estático a Jonathan Orozco.

El triunfo parcial parecía injusto por lo mostrado por los jarochos en la cancha, mientras que los regios habían tocado la puerta con disparos venenosos de Neri Cardozo y Ricardo Osorio.

Pero la justicia en el campo llegó al minuto 26 con el gol de César Delgado, quien de cabeza empujó un tiro de esquina que llegó a segundo poste para el 1-1.

Después del empate, la magia de Suazo comenzó a sentirse en el Tec.

Con un cabezazo a un centro medido del "Chelito", el chileno mandó el balón a la red al 39' para el 2-1. Era su gol 99.

Antes del cierre del primer tiempo y el inicio del segundo, los Tiburones merodearon el arco rayado, pero el travesaño y la buena ubicación de "Jona" evitaron el empate.

Al minuto 66, el Monterrey finiquitó el partido con un gol de Cardozo, quien recibió un pase del "Chelito" afuera del área, y mandó un disparo cruzado que no pudo alcanzar el portero Melitón Hernández para el 3-1.

Omar Arellano, quien había entrado de cambio, tuvo el cuarto gol en sus botines, tras una asistencia de Suazo, pero un atento Hernández le frustró el festejo.

Y cuando el partido agonizaba, el gol del centenario de Suazo llegó.

Corría el minuto 91, el "Chupete" tomó un balón a las afueras del área y envió un pase a Severo Meza, quien llegó hasta el portero y devolvió la cortesía al chileno para su gol 100.

El festejo de Suazo fue eufórico e hizo recordar aquella frase que dijo cuando llegó a Rayados: "Yo no prometo goles... los hago".

Ahora, por increíble que parezca, los Rayados están con vida.