La convocatoria de Rafael Márquez para el Mundial de Brasil no está en duda.

Miguel Herrera no piensa crucificar al hombre que será su capitán en la Copa del Mundo porque tiene plena confianza en que no volverá a perder la cabeza.

La patada que tiró el zaguero a Erwin Saavedra, del Bolívar, y que ayer le costó la roja inmediata en la Libertadores, le hizo recordar al "Piojo" sus años como jugador.

Sobre todo aquel episodio de 1993, cuando el ahora estratega se hizo de golpes y empujones con el hondureño Dolmo Flores, con lo que se ganó la expulsión en un partido eliminatorio, que a la postre lo dejó fuera de Estados Unidos 94.

Con un "no" tajante respondió ante la pregunta de sí el ex defensa del Barcelona podría quedar fuera de la justa mundialista.

"No. Me mostró que su carácter, determinación y liderazgo es importante para el grupo", afirmó.

El técnico nacional indicó que seguramente Gustavo Matosas, timonel del León, ya tomó cartas en el asunto, por lo que esperará para sentarse a platicar con Márquez.

"En su momento vamos a hablar del tema, es una cosa interna", recalcó el "Piojo".

Herrera dijo que si alguien sabe lo que es perder la cabeza es él, por eso tiene confianza en saberle llegar a los jugadores para apoyarlos a cuidar este tipo de acciones, que pueden echar a perder el trabajo del grupo en un partido.

"Lo he sufrido en carne propia y ver que muchas cosas se te van por esa tontería, que a mí me pasó, Rafa está en la recta final de su carrera, que ha sido brillantísima, y la mejor forma de irse es salir a mostrar la calidad de ser humano que es, haciendo cosas importantes en un Mundial", explicó.

Para el DT Nacional fue importante saber que Márquez se manifestó a través de Twitter para ofrecer disculpas.

"Es parte de saber que se equivocó y que está tratando de erradicar esta situación en su carrera. También es válido reconocer cuando te equivocas, ya dio su versión. Vamos a trabajar muy fuerte para que no pase (en el Mundial)", aseguró.

Piensa Márquez que no faltará un líder

A pesar de su expulsión de anoche, Rafael Márquez aseguró hace tres semanas que al Tricolor no le faltará un líder en Brasil 2014.

"Siempre he sido el líder de la Selección, llevo tres Mundiales siendo el capitán, siendo el líder y conozco muy bien lo que tengo que hacer", expresó a CANCHA.

"Ahora he madurado muchísimo, tengo más experiencia, quizá no soy el mismo de antes en cuanto a capacidades físicas, pero puedo resolverlas de otra manera, creo que es una gran oportunidad la que se me presenta para hacer historia".

Su palmarés mundialista incluye Corea/Japón 2002, Alemania 2006 y Sudáfrica 2010, justas de las que se extrae su récord como el mexicano con más encuentros jugados en dicho torneo, con 12.

La cifra tuvo el riesgo de estancarse en la docena, pues en 2012 apenas disputó dos cotejos con el Tri al mando de José Manuel de la Torre.

"Desde luego que pasaba por mi mente (no ir a Brasil), pero seguí trabajando, seguí haciendo las cosas lo mejor que podía para tratar de volver a la Selección", señaló.

El cambio se dio a finales del 2013 con el paso de Víctor Manuel Vucetich y la llegada de Miguel Herrera al banquillo nacional, estrategas que voltearon de inmediato hacia Márquez al grado de ser confirmado por el "Piojo" como el único jugador seguro para la justa.

"El hecho de a veces no participar en la Selección nunca me quitó las ganas de pensar en volver, así que gracias al esfuerzo y buen trabajo con León me dio el mérito de regresar", apuntó.

"En todos lados trato de hacer mi trabajo dentro y fuera de la cancha, trato de ayudar al jugador, de sacar toda la experiencia que he tenido en toda mi carrera para bien de mi equipo y eso es lo que Miguel ha visto en mí".

Con el lugar asegurado, a Márquez le resta contar 50 días para disfrutar de Brasil 2014, una cita para agrandar su currículum dentro del Tricolor.