Se metió a la casa del Tijuana un "viejo amigo" y borró la sonrisa de los Xolos.

Cuando el equipo fronterizo ya saboreaba su segundo triunfo del torneo, apareció en escena el sudamericano Fidel Martínez, ex canino, y le entregó a Leones Negros de la Universidad de Guadalajara el 1-1 con el cual salvó la noche en el Estadio Caliente.

Al minuto 77, Martínez se metió por el centro entre dos zagueros rivales y al entrar al área fusiló a Cirilo Saucedo para el empate.

Un gol que no reflejó demasiado lo que fue el partido, ya que los Xolos manejaron el balón más tiempo y no encontraron los mejores caminos para reflejarlo en el marcador.

El tanto del Tijuana se bañó de estética. Al 23', el venezolano Juan Arango prendió un esférico de media distancia y techó a Humberto Hernández para ponerlo en el borde del travesaño y luego ver cómo picó hacia adentro de la cabaña visitante.

Ese gol le dio seguridad a los de la frontera norte, pero dejaron pasar el tiempo sin más presión sobre la U. de G.

Antes del empate, los caninos estuvieron cerca del segundo, en una escapada de Dayro Moreno por izquierda con el subsecuente disparo que apenas con las uñas desvió Hernández.

Y en los instantes finales, Xolos volvió a tocar la puerta. Un tiro de Alfredo Moreno exigió el lance del portero de Leones Negros de nueva cuenta, ya al 90', y en la reposición un tiro libre de Arango volvió a provocar el vuelo de Hernández para mantener la igualada.

Tijuana llegó a 7 puntos y la Universidad de Guadalajara se movió a 5.