En esta edición del Clásico entre América y Chivas, hay jugadores que no conocen el sabor de este duelo.

Por parte de las Águilas están: Paolo Goltz, Osmar Mares, Moisés Velasco, Oribe Peralta, Michael Arroyo, "Chepe" Guerrero y Gonzalo Díaz.

De lado de las Chivas están: David Toledo, Fernando Arce, Hedgardo Marín, Ángel Zaldívar y Sergio Nápoles.

A los integrantes del cuadro azulcrema ya les tocó perder ante Cruz Azul y Pumas, mañana tienen que salir a defender los colores con algo más que disposición, para que puedan sentir la pasión que se destila en este tipo de encuentros.

Oribe Peralta, quien viene enrachado con los goles, dijo que siempre siguió a lo lejos este partido y sabe todo lo que está en juego para los americanistas, por lo que quiere anotar para dejar el honor intacto.

"Es un juego donde no importa cómo llegues, todos salen con la adrenalina a tope, buscando hacer lo mejor en la cancha, la concentración va a ser básica y vamos a evitar cometer errores", explicó el "Hermoso".

Paolo Goltz ya se frota las manos por jugar el Clásico frente a las Chivas, ¿y por cambiar su historia?

Si alguien sabe de estos duelos es el defensa argentino, quien nació como futbolista en el Huracán y durante 10 años tuvo alegrías y sinsabores frente al archirrival San Lorenzo. Con Lanús (2010-14), vivió en carne propia el llamado "Clásico del Sur" frente a Banfield.

Pero la fortuna no le ha sonreído de la misma forma en México.

En la derrota de 1-0 contra Pumas, el desvío de Goltz, a un disparo de Dante López, dejó sin reacción a Moisés Muñoz, en el gol al 89'.

En el 4-0 frente a Cruz Azul, el argentino tuvo una tarde desastrosa. En el segundo tanto, fue empujado por Mariano Pavone, pero el árbitro no se percató; en el tercero, dejó entrar libre a Gerardo Flores y en el cuarto prefirió no faulear a Joao Rojas para evitar la expulsión.

"Jugué varios Clásicos, en mi carrera me marcó mucho y sé lo importante que son para la carrera de un futbolista, por eso creo que el sábado me va a marcar mucho, lo espero con muchas ansias", expresó.

Mención aparte merece Ángel Reyna, quien cómo americanista le puso sal y pimienta al Clásico, pero ahora le toca estar del otro lado.