Les ponen revolcada
Dulce Moncada México, Monterrey (18 abril 2015)
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  • Los Tigres bailaron a los Rayados con un espectacular segundo tiempo.
    FOTO: César D. Pauli
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  • Damián Álvarez fue de los más efusivos en los goles.
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  • Jonathan Orozco se llevó tres goles y se salvó de tres más, pues los balones pegaron en el poste.
    FOTO: Velia De La Cruz
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  • Enrique Esqueda les metió el tercer gol cuando no había cumplido ni los dos minutos en la cancha.
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  • Un Clásico totalmente amarillo
    Repasa la goliza de Tigres a Rayados en el Clásico 104.

"¡Tigres, tres, Rayados, cero!", fue el anuncio que hizo la voz del Estadio Universitario, al tiempo que los juegos pirotécnicos iluminaban el cielo tras el Clásico 104, que se convirtió en una fiesta exclusiva para felinos.

Así como en la cancha sólo existió un equipo, en las tribunas, los festejos también se pintaron de los colores azul y amarillo de unos Tigres que se devoraron a los Rayados poco a poco hasta no dejar nada.

En la Ciudad, los Tigres mandan, porque tomaron la ventaja en el historial con 36 triunfos, uno más que los Rayados, pero también porque dieron un paso firme hacia la Liguilla del Clausura 2015 al subir al cuarto lugar con 22 puntos, mientras dejaron al acérrimo rival lejos de zona de clasificación.

Fue una noche redonda para el equipo dirigido por Ricardo Ferretti, quien llegó a 25 derbis dirigidos y festejó su "Clásico de Plata" con un sonoro triunfo que tuvo todo su sello.

Del otro lado, la amargura de miles de aficionados rayados es la misma que debe sentir Antonio Mohamed, quien no ganó ningún Clásico como jugador y debutó anoche como entrenador con una justa derrota.

Tigres superó al Monterrey en todos los renglones. Así como "Tuca" le ganó la partida al "Turco" desde lo táctico, sobre la cancha, los jugadores felinos ejecutaron mejor que sus rivales.

Aunque el primer disparo del partido lo hizo Dorlan Pabon desde unos 30 metros, Rayados no se volvió a acercar mucho más que eso a la portería felina en todo el partido.

Edwin Cardona y Pabon pueden ser tan valiosos al ataque, como un lastre al momento de defender. Tigres encontró la forma de anularlos a los dos y a partir de ahí empezó a imponer condiciones.

En cuanto los felinos se hicieron del balón, no le dejaron ninguna oportunidad a los albiazules. Tigres desarrolló el juego que planeó al pie de la letra; en ningún momento parecían estar improvisando.

Si Rayados quería ganar el partido con sus talentos individuales, Tigres se impuso con su juego colectivo. Ese que se empezó a sentir desde antes de terminar el primer tiempo, cuando el área rayada resintió el bombardeo felino con un disparo de Gerardo Lugo que estrelló en el travesaño.

Sin salirse del guión, Tigres manejó la pelota pacientemente como la fiera que está a la caza de su presa. Así encontraron el 1-0.

Damián Álvarez inició la jugada por la banda izquierda, después de dos toques, el balón llegó hasta Guerrón por la derecha, el ecuatoriano la metió al centro donde apareció de nuevo Damián, quien dio un leve toque a un solitario Lugo, quien marcó con un colocado disparo de derecha.

Explotó el Universitario y Tigres tenía el partido justo donde lo quería.

Joffre Guerrón estrelló dos disparos en el poste y Damián, quien había sido medianamente controlado por Hiram Mier, se volvió una pesadilla, cuando Severo Meza fue el encargado de cuidarlo.

Tigres era muy superior y a falta de 20 minutos, entraron Antonio Briseño y Egidio Arévalo. Daba la impresión que Ferretti se conformaba con esa ventaja, pero realmente se alistó para liquidar el juego al contragolpe, lo hizo y por goleada.

Obligado a buscar el triunfo, Rayados se abrió de capa, con lo que pudo, porque quedó claro que el plantel está muy corto.

A pesar de haber sumado a Luis Guillermo Madrigal, este prácticamente no tocó el balón en los 30 minutos que participó y el Monterrey no tuvo ocasiones. Cándido Ramírez y Lucas Silva pasaron desapercibidos.

Entonces, Arévalo metió un pase en un gran hueco que dejó la zaga rayada y Rafael Sobis puso el 2-0. Luego, Enrique Esqueda, marcó el 3-0 en tiempo de compensación.

El festejo fue descomunal, pero no era exagerado para la ocasión. Tigres ganó el Clásico con autoridad y así como se ve poderoso en Sudamérica, también pinta fuerte en la Liga.

Hora de publicación: 20:52
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