Va de dos, dos, pero Joshúa Ábrego no quiere ser considerado el " Rey del Ascenso".

El zaguero vivió este sábado su segundo ascenso a la Primera División, pues además de hacerlo en este 2015 con los Dorados de Sinaloa, vivió el de los Xolos de Tijuana en el 2011.

"Espero no tener una tercera porque quiero estar en Primera División, pero bueno, creo que sí aporto algo para el equipo, en base al trabajo, y no nomás yo, el compañerismo que hubo durante todo el torneo, la solidez defensiva, el ser matones nos da tranquilidad, y queremos seguir haciendo historia aquí", dijo Ábrego.

Tan buena ha sido su suerte, que en tono de broma dijo que esta será una anécdota que le contará a sus hijos, pero primero tendrá que encontrar al amor de su vida.

El defensa saboreó este ascenso igual que el de hace cuatro años.

"Los dos, cada uno tiene su sabor especial, en Xolos estuve más tiempo que acá, acá tengo dos años, en Xolos cuatro, y los dos son muy especiales para mí", agregó.

Para Joshúa, la unión del plantel fue clave para que Dorados consiguiera el ascenso al máximo circuito tras nueve años de ausencia.

"Yo creo que la unión que tiene el grupo, nos consideramos hermanos, todos nos llevamos muy bien y eso fundamental para que a un equipo le vaya muy bien", mencionó.

Tras vivir el ascenso con Xolos, Ábrego bajó dos años después a la división menor, a la cuál espera no regresar y consagrarse en Primera.