La celebración del Gran Premio de México de la F1 obligó al CNAR a reducir su capacidad de atención y operar con el mínimo personal además de ver afectados sus accesos.

Esas condiciones pudieron influir para que la clavadista Andrea Larios Terres, de 10 años, perdiera la vida el miércoles pasado tras no recibir los cuidados necesarios, con lo que su historia hubiera sido diferente, consideraron algunos padres de familia que hablaron con CANCHA bajo el anonimato.

Desde la mañana del miércoles la actividad en el complejo bajó debido a una circular que vía intranet se les hizo llegar a los "coordinadores de todos los turnos de Matrícula CNAR y Alto Rendimiento, y de la cual CANCHA posee copia, en la que se les informaba que ante la celebración del GP habría acceso restringido.

Por tal motivo, los alumnos que generalmente dejaban el lugar los fines de semana tendrían que hacerlo esta ocasión a partir del jueves y regresar hasta el lunes 2 de noviembre.

Además, a personal técnico, médico y administrativo, se les notificó desde principios de mes que no podrían ocupar sus cajones de estacionamiento a partir del 19 de octubre por cuestiones de logística del GP, que habría cancelaciones de entrenamientos y reprogramación de estudios médicos, entre otras medidas, propiciando que muchos de ellos ni siquiera se presentaran.