Fue una noche que jamás olvidará, y por eso adelanta que seguirá trabajando duro para que haya muchas más en su carrera.

Óscar Valdez tuvo un sábado inolvidable. Se proclamó campeón del mundo Pluma a los 25 años en el Hotel MGM Grand & Casino, pleito en el que tuvo sentimientos encontrados, pues le dedicó el combate a Luisito, un primo que murió hace un mes.

"Este logro se lo dediqué a mi primo Luisito, que falleció hace como un mes en un accidente de motocicleta. No era mi primo, sino mi hermano, muy cercanos, que mal que no estuvo aquí, pues siguió mi carrera siempre", apuntó el de Nogales, Sonora.

Valdez, quien noqueó en el segundo asalto al hasta ese entonces invicto, el argentino Matías Rueda, confiesa que llegando a casa lo primero que hará será comerse unos buenos tacos de carne asada.

"Un sueño hecho realidad, pues desde niño, desde los ocho años quería ser campeón. Pasan miles de emociones, ahora sí que hacen falta unos tacos de asada, lo único que pienso es disfrutar con mi familia, iré a la tumba de mi primo, y pues disfrutar, pues regresaremos ya al gimnasio", apuntó.

El apodado "The King" dejó su marca en 20-0, 18 KO's, y dijo que está listo para hacer su primer defensa.