Una fluida exhibición acrobática con aros y porras permitió al equipo ruso de gimnasia rítmica ganar el domingo en Río su quinta medalla de oro olímpica consecutiva.

España tenía grandes esperanzas de poner fin al reinado de Rusia, pero finalmente se quedó con la plata, superando a Bulgaria, que se fue con el bronce.

Además, por quintos Juegos consecutivos Rusia completó un doblete en la gimnasia rítmica, después del triunfo de Margarita Mamun en la individual del sábado.

España ganó el oro en 1996 cuando el deporte hizo su debut olímpico, pero no pudo conseguir subirse al podio en los próximos cuatro Juegos.