Entre asombro, drama y alta dosis de adrenalina, unos 26 mil aficionados disfrutaron este martes en el Estadio Monterrey el regreso de las Monster Trucks con el espectáculo denominado "MonsterShowdown".

Una docena de pilotos, incluyendo a una mujer de 18 años, encendieron a la multitud a bordo de las llamadas "Patonas", en un evento que volvió a la Ciudad después de tres años.

Kaylyn Migues le dio el toque femenino a la velada a bordo de "Jailbird" y peleó las palmas junto a su padre Darren Migues, en las competencias de "Wheelies, "Racing" y "Free Style".

Mención especial se ganó el intrépido Alejandro Arellano, al desafiar el peligro. Primero con un "Stratus" cruzó una casa en llamas, luego con un "Topaz" se estrelló con otro vehículo y remató subiendo una rama buscando saltar una montaña formada por cuatro coches.

Arellano se impulsó sobre la rampa, pero se impactó y su auto se volteó dramáticamente, ocasionando que el piloto tardara en incorporarse lesionado. El público lo premió con una sonora ovación.

Las camionetas con imponentes neumáticos, con motores de 2 mil caballos de fuerza, impresionaron a los miles de niños, mientras sus padres grababan los saltos, las "donas" y las carreras con sus teléfonos celulares.

Jack Koberna fue el ganador en la prueba de "Wheelies", en tanto que Rick Swanson superó a su hijo Eric en la Final de "Racing".

"Perro Loco", "El Tamal Caliente", "Rat Attack", "Hurricane Force", "Unamed &Untamed", "Storm Damage", "Equalizer", y Hurricane Force", electrizaron a la multitud.

Luego de tres horas de feroz competencia, acompañada con música estridente, El "MonsterShowdown" culminó en una forma por demás espectacular, con un "back flip" de Steve Thompson, y un espectáculo de fuegos artificiales.