Manny Pacquiao no cree que perdió su cetro Welter de la Organización Mundial de Boxeo ante el estadounidense Timothy Bradley por decisión dividida.

"Respeto a mi oponente, pero estoy seguro que gané la pelea. Está bien y es parte del juego", expresó el filipino en conferencia de prensa tras la pelea. "Pensé que todas las tarjetas serían para mí".

Dos jueces vieron ganar al estadounidense al darle las tarjetas por 115-113, mientras que el otro mostraba al "Pacman" como vencedor por 115-113.

"Le doy el crédito, quizá ganó dos o tres rounds", dijo Pacquiao, quien quiere la revancha. "Gracias Bob Arum por todo. Todo se lo dejó a mi promotor".

Arum no se quedará con los brazos cruzados y le pedirá al presidente de la Comisión de Nevada de poner a los tres jueces ante la prensa para aclarar las dudas.

"La decisión de hoy es ridícula", mencionó el promotor.

Casualmente, el filipino no tenía anunciada para la noche de la pelea la gran fiesta como en anteriores combates.

Por su parte, el estadounidense se mostró feliz por haber ganado.

"Pacquiao es un gran guerrero. No sé que decirles... estoy feliz", comenta.

Bradley llegó a la conferencia de prensa en silla de ruedas, porque durante la pelea se lesionó los tobillos.

"Me lesioné los tobillos en el segundo round pero seguí. Quizá haya revancha en noviembre", aclara.

El ahora campeón del cetro Welter del OMB destacó su movilidad y cómo evitó los golpes de "Pacman".

"Hice fallar mucho a Pacquiao", comentó.