La Selección Mexicana ya está enferma.
Su cuerpo técnico fue incapaz de detener los síntomas que le aquejaron desde principio de año y el cuarto 0-0 del Hexagonal Eliminatorio, ahora ante Costa Rica, confirmó el diagnóstico.
Al empatar por tercera vez sin anotaciones en la que fuera en otros procesos su indomable casa, el Trico