El GP de Alemania sigue con muchos problemas. FOTO: Archivo

Con ausencias recientes en los calendarios 2015 y 2017, el Gran Premio de Alemania regresa este fin de semana a la Fórmula Uno con más problemas que siguen poniendo en duda su próxima aparición.

Los circuitos de Hockenheim y Nürburgring, para subsanar problemas económicos, llegaron a un acuerdo que, de la temporada 2009 y a la de 2018, se rotarían la sede de la carrera cada año.

Hasta 2013, la pista ubicada cerca de la ciudad de Bohn pudo seguir con el acuerdo, pero, a partir de 2015, cuando le tocaba recibir la prueba, tuvo que cancelar y, por consiguiente, el GP de Alemania desapareció del calendario ese año y en 2017.

La idea general del acuerdo era porque ninguna de las dos pistas estaba dispuesta a perder dinero cada año, pero podían hacer frente a recibir un impacto cada dos años.

Sin embargo, Hockenheim ha dejado en claro que no puede renovar en términos similares, ya que no quiere seguir perdiendo dinero.

"El contrato termina en 2018", dijo Georg Seiler, CEO de Hockenheim, a la publicación alemana MotorsportMagazin.com a principios de la actual temporada.

"Por desgracia, no puedo decir aún si las cosas seguirán de forma positiva. Sólo puedo decir que nos esforzamos por mantener la Fórmula Uno en Alemania. Pero hay muchos factores involucrados".

La pista ha sugerido una forma de compartir ingresos, ya sea sin un costo por albergar la carrera o la reducción del mismo.

En Hockenheim se ha consagrado pilotos alemanes como Michael Schumacher, con cuatro triunfos, y Fernando Alonso y Lewis Hamilton, con tres.