Gruden no le encuentra la forma a los Raiders. FOTO: AP

Después de cortar una racha de 13 temporadas sin acudir a Playoffs en 2016, el futuro de los Raiders parecía ir por buen camino.

Sin embargo, el año pasado tuvieron marca de 6-10, algo que le costó el trabajo a Jack Del Rio y que le brindó a Jon Gruden su primera oportunidad como entrenador en jefe en la NFL desde 2008.

Hasta ahora, las cosas no han cambiado.

El equipo posee récord de 1-5 al llegar a la Semana 8 y ahora da la impresión de que nunca tuvo la intención de competir, luego de cambiar antes del inicio de campaña al linebacker Khalil Mack a los Osos y enviar apenas hace unos días al receptor Amari Cooper a los Vaqueros.

"No nos veo haciendo más transacciones. Ciertamente, no nos veo cambiando a nuestro quarterback", declaró en conferencia de prensa Gruden, quien tuvo una reunión con los jugadores.

Y es que si bien Derek Carr no ha estado tan fino (7 pases de touchdown por 8 intercepciones), el mariscal de campo es el menor de los responsables de la debacle de Oakland, cuya defensiva está permitiendo casi 400 yardas por partido, una de las peores en 2018.

Aunque a esta línea de los malosos tampoco parece interesarle mucho la crisis.

"Perdimos, pero yo tengo una hermosa esposa en casa. Voy a tratar de hacer unos bebés", afirmó el linebacker Bruce Irvin, luego de caer en Londres ante los Halcones Marinos en la Semana 6.

Algunos han mostrado su descontento con las decisiones de Gruden y la gerencia, en especial por los cambios de las estrellas Mack y Cooper.

"Cuando lo que dices y lo que haces son dos cosas diferentes, hay un problema. Debemos de confiar en cada uno de nosotros y jalar en una dirección", declaró a The Athletic un jugador que solicitó el anonimato.

Para colmo, los Raiders, que se mudarán a un flamante estadio de casi 2 mil millones de dólares en Las Vegas a partir de 2020, no han renovado el contrato de arrendamiento del Oakland-Alameda County Coliseum y, con cinco juegos más por disputar ahí este año, aún no se sabe dónde jugarán el próximo calendario.

La única buena noticia es que tendrán tres selecciones de primera ronda en el siguiente Draft de la NFL y otras dos en 2020, por lo que buscarán llevar un equipo reluciente a "La Ciudad del Juego".