¿Se vale descansar?
Vaya que el ajetreo de Liga y Copa MX afectaron a Cruz Azul, que tuvo oportunidad de descansar hasta este miércoles.
El técnico Pedro Caixinha no modificó el plan original de darle a la plantilla el día libre pese a que la noche del martes cayeron 3-1 ante el Puebla en Copa, justo cuando el sábado reciben al sublíder liguero, León.
Y es que los celestes no habían podido darse un respiro desde el lunes pasado, cuando retomaron los entrenamientos.
El conjunto cementero viajó el martes de la semana pasada a Oaxaca para visitar al día siguiente a Alebrijes, monarca del Ascenso MX.
Un día después, entrenaron en la capital oaxaqueña y por la tarde volaron a Guadalajara, donde tuvieron una práctica el viernes antes de encarar a Chivas el sábado por la noche.
El equipo regresó el domingo en la madrugada y horas después ya entrenaba dividido en dos, con la mente puesta en el encuentro ante los Camoteros.
Así que el lunes cerraron preparación y fue el martes cuando los celestes salieron abucheados del Estadio Azul al caer ante La Franja.
Pero Caixinha considera importante que el grupo se relaje y por eso dio descanso a mitad de semana, con todo y que ya sólo tendrá hoy y mañana para prepararse hacia el duelo ante La Fiera, que viene con paso perfecto tras dos fechas del Clausura 2018.
Para el estratega luso es vital el descanso pero, ¿será el mejor momento para que los jugadores se relajen cuando viene la prueba más difícil que tendrán hasta ahora en la Liga MX? El sábado a las 19:00 horas lo sabremos.
Aprovechan el día Y ya que hablamos del día libre que tuvo ayer Cruz Azul, les platico que algunos jugadores aprovecharon para alegrarles el día a niños con cáncer.
Los chilenos Felipe Mora, Enzo Roco y Martín Rodríguez se dieron una vuelta por el Instituto Nacional de Pediatría para entregar regalos a estos pequeños que libran duras batallas para recuperar su salud.
El delantero, el defensa y el mediocampista estuvieron toda la mañana saludando y sorprendiendo a más de uno de los infantes, desde aquellos que son celestes y que no pudieron contener la sonrisa, hasta aquellos que ya no esperaban su presente de Reyes Magos.
Lo que me parece increíble es cómo estos celestes no dejaron que la caída en Copa MX del martes pasado, 3-1 ante Puebla, arruinara la encomienda que ellos mismos organizaron.
Eso sí, me cuentan que salieron felices, pues Mora expresó que es impagable la sonrisa de un niño en medio de la adversidad, la cual, a todas luces es más cruenta para esos pequeños que la que podían llevar los futbolistas por perder un partido.
Ojalá que esto les sirva para enderezar la nave de cara al juego del sábado ante León, por la Liga MX.
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