Amables aficionados: Dallas se juega hoy su posible última carta dentro de su afán de mantenerse con vida para la postemporada.
Su visita a Tampa debe ser coronada por una victoria, la primera sin Romo, y podría basarse en su esfuerzo defensivo.
Enfrentan a un mariscal novato, Jameis Winston, al que deben poder confundir lo suficiente para controlarlo, esperando que su ofensiva, que
mejora paulatinamente, ponga en la pizarra los suficientes puntos para ganar.
De hacerlo, tendrían a Tony Romo de regreso para su siguiente partido, en Miami el 22, y cuatro días después contra Carolina en el Día de Acción de Gracias, saga nada fácil debido a que los Vaqueros están obligados a ganar estos tres partidos para sobrevivir.
Por lo pronto hoy tendrán veladoras prendidas deseando que Washington pierda con Nueva Orleáns, Filadelfia en Miami y los Gigantes con Nueva Inglaterra.
Este último juego es de los más interesantes de la jornada por su ingrediente histórico.
Desde hace ocho años, los Patriotas han derrotado al menos una vez a todos los equipos en la NFL, con excepción de los Gigantes.
Estos les arrebataron lo invicto en el Súper Tazón 42, los volvieron a derrotar en el 46, además de un partido en campaña regular.
Eli Manning lleva esa marca de 3-1 contra Nueva Inglaterra y el entrenador Tom Coughlin le ha ganado cinco de seis a Bill Belichick.
Es el único entrenador contrario que Belichick no ha podido dominar en su carrera. Llega a este encuentro con la mejor ofensiva de la Liga y con Tom Brady proyectando una de sus mejores temporadas, así que Nueva Inglaterra es marcado favorito en el partido.
Pero era el favorito igualmente en los tres encuentros perdidos ente Nueva York, así que ese factor quizá no tenga el peso usual. Pero de que se espera un juego interesante, no hay la menor duda.
Refiriéndonos ahora a los aspirantes a los puestos comodín en la AFC, Pittsburgh fue afortunado en recibir a un débil conjunto de Cleveland, deben ganar aun sin Roethlisberger, Búfalo ya derrotó a los Jets y los igualó con 5-4, mientras que Oakland, si puede librar la dura aduana de Minnesota, se mete de lleno a esta disputa.
Finalmente, en la NFC el duelo clave es el de Arizona en Seattle. Si los Cardenales pueden salir de ahí con un triunfo, se enfilarán sin mayor problema al título.
Para Seattle, pudiera ser la última llamada.
Por ahora, hacemos un pausa...
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