¿Dijo un jugador naturalizado que la razón por la que muchos futbolistas llegan y desaparecen en México es por conformistas? ¿Dónde está la mentira o la ofensa?
Daniel Ludueña puso al parecer el dedo en la llaga y de inmediato brincaron una buena cantidad de colegas suyos que: o entendieron mal su declaración o ya pasaron el riesgo de esa mediocridad, pero que de cualquier manera no son
implicados.
Recuerdo a dos muy destacados técnicos que tenían frases reveladoras para aquellos que se creen futbolistas de Primera División. Ricardo La Volpe decía: "¿Debutar? Debuta cualquiera, por favor... mi mamá, mi tía, mi abuela, quien sea. Lo difícil es mantenerse ahí, no debutar". Javier Aguirre, a su vez, dejaba en claro que no basta con pisar la cancha, salir en la foto o firmar un contrato: "Para considerarse futbolista de Primera División hay que jugar por lo menos 50 partidos".
"Así como debutan, rápido desaparecen... se conforman con eso... un chavo de 17 años tiene el mismo celular que uno de 30. Están esperando a que salga el último modelo para comprarlo... Tener todo muy fácil hace que te sientas cómodo. Con un carro y dos pesos en el bolsillo piensan que lo tienen todo, pero es una carrera larga, en la cual no es fácil llegar, menos mantenerse".
Lo anterior es un extracto de la declaración tan criticada del "Hachita".
Ludueña no dijo que el futbolista mexicano es conformista, se refirió a la enorme cantidad de jugadores cuya máxima preocupación es levantar su status social cuanto antes; aquellos que buscan cobrar una jugosa remuneración que en ninguna otra profesión u oficio podrían recibir tan rápido... señaló a esos que "se la creen" por ser parte de la foto oficial, por salir a la banca, por tener la ropa del Primer Equipo y sí, por cumplir el sueño del debut, pero que una vez cumplido, te das cuenta que no es verdaderamente trascendente, a menos que detrás vengan muchos más partidos.
Es muy triste ser testigo de tantas carreras desperdiciadas una vez que hubo talento, dedicación, interés y ojos que les detectaron; futbolistas devorados por el conformismo, que se indigestaron con una probadita y que en su inmensa mayoría pasarán el resto de la vida entre el orgullo de haber sido parte del futbol profesional, la decepción de haberlo dejado y la nostalgia de haberlo probado. A esos hizo referencia Daniel Ludueña en su mal entendida conferencia de prensa. A esos que no le reclaman... porque saben perfectamente que tiene razón.
No, no hay mentira en las palabras de Ludueña, ni razón para que se ofendan quienes integran Selecciones con limite de edad. Tanto el "Hachita" como muchos de nosotros hemos visto aparecer y desaparecer suficientes futbolistas como para establecer que hay mucho talento desperdiciado en México, por culpa del conformismo.
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