Mahomes pudo ser jugador de beisbol. FOTO: Especial

Era el "milusos" de los deportes en la preparatoria.

Patrick Mahomes, de 24 años y quien será el quarterback de los Jefes de Kansas City el 2 de febrero en el Super Bowl LIV, bien podría jugar ahorita en las Grandes Ligas o hasta en la NBA.

La estrella de los Jefes, considerado uno de los mejores mariscales de campo de la actualidad --fue nombrado el Jugador Más Valioso de la NFL en la campaña pasada--, fue muy versátil durante la preparatoria, ya que probó distintas disciplinas.

Y es que el amor por el deporte lo trae en la sangre, ya que es hijo del pitcher Pat Mahomes, quien estuvo en la Gran Carpa por 11 campañas en seis equipos.

Uno de los mejores momentos en la adolescencia de Mahomes se dio cuando un día en la Whitehouse High School de Texas jugó dos partidos de beisbol, en uno lanzó un juego sin hit para llevarse el triunfo 2-1, mientras que en el segundo se fue de 3-4 para ayudar a la victoria de 10-3.

Tenía tanta calidad Mahomes, pitcher derecho, que fue seleccionado en 2014 en la ronda 37 del Draft de las Grandes Ligas por los Tigres de Detroit, con quienes no firmaría contrato.

Además, en la duela como basquetbolista no era malo, pues llegó a promediar 19 puntos y ocho rebotes.

Pero vino el brinco a la Universidad, y en Texas Tech puso sobre la cancha al futbol americano y al beisbol, pero no tardó mucho en definirse por el primero y comenzar un camino que hasta hoy ha sorprendido a todos.