México se quedó sin F1 en 2020. FOTO: Archivo

Los pilotos mexicanos se estremecieron luego de que se diera a conocer la postergación del Gran Premio de la Ciudad de México, pero admitieron que la pandemia no ha dado tregua.

La alta dirección administrativa de la Fórmula Uno en el mundo y autoridades mexicanas que lideran la carrera capitalina dieron a conocer el viernes que el GP de la CDMX se realizará el siguiente año, pues las condiciones sanitarias actualmente no son las adecuadas para el evento que estaba previsto correrse el 1 de noviembre próximo.

Mario Domínguez, ex corredor profesional y ahora analista en el automovilismo, vio con tristeza la decisión del aplazamiento, pero reconoció que es lo mejor para la afición nacional.

"Es una lástima, pero sin duda puede ser una decisión acertada puesto que no se hubiese podido llevar a cabo con un lleno total, debido a las medidas de distanciamiento", aseveró el ex conductor del serial estadounidense de IndyCar.

"Es una lástima para México porque es una derrama económica gigantesca la que se pierde".

Otros conductores de seriales que se corren en el País, como Salvador de Alba Jr. y Ricardo Pérez de Lara, dijeron que con el diferimiento se pierde una gran cantidad de ingresos por derrama económica.

"Fue una buena decisión, pero lo veo más por el lado de que el autódromo es hospital de Covid-19 y se me hace buena idea que continúe así, obviamente vamos a extrañar la F1, pero hay que buscar el bienestar de todos", aseveró De Alba Jr., integrante de la Nascar México.

"Económicamente es un impacto fuerte para la Ciudad de México, pero ahorita tampoco es el momento porque todos estamos afectados con la pandemia y ayuda a que no haya gastos extraordinarios para la gente", consideró por su parte Ricardo Pérez de Lara, piloto de la Súper Copa Mercedes.