Siempre he afirmado que el fin de semana de Playoffs Divisionales es el más atractivo de la postemporada en la NFL. Regularmente llegan a esta instancia los ocho mejores equipos de la NFL, o al menos los que mejor están jugando a estas alturas de la campaña, y en esta ocasión no tengo dudas de que quienes se mantienen con vida están en esta instancia por merecimientos propios.

Ahora bien, sin restar méritos a la jornada sabatina, me parece que los dos partidos que habrán de celebrarse hoy son claramente los más interesantes. Y es que no tengo duda de que cualquiera de los cuatro equipos que entran en acción a partir del mediodía, serían no sólo dignos representantes de sus conferencias en el Súper Tazón, sino que tienen ingredientes de sobra para levantar el Trofeo Vince Lombardi el 5 de febrero.

Ver a Green Bay y a Dallas siempre será especial. Este es un auténtico clásico de la Conferencia Nacional, y es imposible no recordar aquellos dos grandes duelos en 1967, cuando Lombardi y Landry se vieron las caras en dos duelos de campeonato inolvidables.

La rivalidad ha mantenido su intensidad a través del tiempo y tuvo su último capítulo hace un par de años con la polémica "no atrapada" de Dez Bryant en el Lambeau.

Esta tarde la historia se escribirá en casa de los Vaqueros, donde la línea ofensiva y Ezekiel Elliott tendrán que jugar a su máximo nivel para que Dallas haga valer su condición de favorito.

El ataque terrestre es el factor que ha hecho ganador a este equipo, y no veo otra forma de limitar el daño que seguramente hará Aaron Rodgers cuanto tenga el balón.

En Kansas City, los Jefes buscarán demostrar lo equivocados que estamos muchos que, durante la temporada, ignoramos sus cualidades.

La defensa es sólida, agresiva y roba muchos balones. La ofensiva no comete errores, y gracias a Travis Kelce y Tyreek Hill ahora también puede ser explosiva, mientras que los equipos especiales son una amenaza constante.

Si bien es cierto que depender de los puntos que anotan en defensa y en equipos especiales es un riesgo, está claro que Pittsburgh tendrá que jugar por nota para salir con vida del Arrowhead.

No tengo duda de que Le'Veon Bell puede tener un día productivo gracias a una línea ofensiva de primer nivel. Sin embargo, Ben Roethlisberger tendrá que elevar su nivel y limitar los errores que han sido una constante en las últimas semanas.

Es una verdadera lástima que, para dos de estos cuatro equipos, hoy inicien las vacaciones.

Por ahora sólo queda esperar que el espectáculo esté a la altura de las expectativas y disfrutar el que bien puede ser el mejor domingo de la temporada.

 
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