Novato cuarentón
 
Si alguno de ustedes rebasó los 40 años y no ha debutado en Primera División, pero tiene la ilusión de hacerlo, déjeme decirles que todavía están a tiempo.

En el mundillo del futbol -no sólo el nacional- los pateabalones sienten que son veteranos cuando rebasan los 23 años, pues se supone que a esa edad ya tendrían que haber debutado y ser titulares.

Hay talento de sobra en Fuerzas Básicas y algunos futbolistas son declarados como grandes prospectos, pero nunca se consolidan y en muchos casos ni siquiera llegan a Primera.

Para el futbol podrían ser viejos, pero jóvenes para la vida.

Sin embargo, no todo se adapta a los esquemas. En 1994 hubo un debut tardío, eso sí, criticado por muchos y alabado por otros.

Humberto Francisco Filizola Haces (2 de febrero de 1950, en Ciudad Victoria) era la máxima autoridad de la Universidad Autónoma de Tamaulipas, que tenía un equipo en Primera y, a los 44 años, hizo su debut en un partido contra el América.

 
 
QUERÍA SER EJEMPLO
 
Filizola se brincó todos los procesos de formación y, en su afán de cumplir sus objetivos, se convirtió en una figura mediática que le robó la atención al cuadro americanista en su visita a Ciudad Victoria, en la segunda vuelta de la campaña 1993-94.

El Rector de la UAT tenía la idea de impulsar al estudiantado a creer en sus sueños.

"El objetivo es demostrar a los universitarios que no hay imposibles, que con esfuerzo, voluntad y ahínco se pueden hacer las cosas", dijo Filizola.

Parte de la crítica en el País lo alabó, pues demostró que un hecho como ése le haría bien a los estudiantes, pero expertos lo tildaron de títere, payaso y una vergüenza para el futbol.

"Hace más de tres años a un grupo de estudiantes, así como estamos nosotros, les prometí que jugaría 5 minutos con los Correcaminos para demostrarles que todo se puede.

"Tuve que registrarme tres años seguidos, prepararme, ponerme a dieta y levantarme a las 6 de la mañana para jugar 5 minutos y el reto lo cumplí; lo hice para que vean que no hay imposibles en la vida", sostuvo.

 
 
DEJÓ IR UN GOL
 
El partido de la Jornada 38 terminó empatado 1-1. Ese día, Filizola fue titular, para sorpresa de propios y extraños, jugó 29 minutos y estuvo muy cerca de anotar un gol.

Al minuto 10, Raúl Martínez Sambulá le puso un pase que lo dejó solo en el área chica. Los aficionados en el Estadio Marte R. Gómez estuvieron a nada de gritar el primer gol del partido y el primero en la carrera de Filizola. Al final, el esférico se fue por un lado
"Me sentí un poco ahogado al principio, pero creo que más que todo fue por la tensión. Tuve la oportunidad de anotar un gol, pero me agarró al contrapié el balón; de haberlo hecho, nada hubiera significado", dijo al terminar el partido.

Un centro delantero de 44 años era algo impensable, pero en un UAT-América se dio.

"Creo que a lo mejor tiene aptitudes, tuvo una oportunidad de gol y, afortunadamente para nosotros, la falló", dijo el lateral Juan Hernández, del América.

El volante americanista Germán Martelotto justificó el debut de Filizola y le tiró flores.

"El rector jugó a los 44 años y considero que no lo hizo tan mal", dijo Martelotto.

"Según tengo entendido, fue una situación de común acuerdo entre Rector, jugadores y técnico, por lo que creo que si hubo acuerdo entre ellos no debe haber problema. Es un gusto que se dio, tal vez por algún otro sacrificio como Rector de la Universidad".

 
 
CAPRICHOS
 
En la historia del futbol mexicano no sólo ha existido el deseo de jugar con muchos años encima.

En enero de 2008, el dueño de las Chivas, Jorge Vergara, avaló la idea de que el entonces máximo goleador de la historia de las Chivas, Salvador Reyes, fuera titular en un partido oficial.

Reyes, entonces de 71 años, consideró que el reconocimiento de la directiva, encabezada por Néstor de la Torre, lo había emocionado.

"Nervios no hay, no es como cuando iba a debutar, es normal, fueron nervios y emoción cuando me dijeron que iban a hacer este reconocimiento, ahorita ya me cayó el veinte", dijo Reyes.

El ídolo rojiblanco jugó 14 segundos en el Estadio Jalisco, contra los Pumas, y relevado por Omar Bravo, quien unos meses después ocupó el lugar de Reyes como el el máximo anotador en la historia del Guadalajara.

Estos caprichos, reconocimientos o ideas locas tienen como objetivo inspirar a la juventud. Quienes tienen la última palabra son los aficionados.

 
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