Son tantos los errores cometidos por todos al hablar o escribir, que resulta imposible recordar y apuntar todos.

Tanto los principales protagonistas del juego, como dirigentes, directores técnicos y comunicadores (o aspirantes a tales), cotidianamente colaboran en el enriquecimiento de la interminable lista.

Algo menos reprobable en el caso de los futbolistas, por supuesto, porque el rol que desempeñan es otro, y porque ya se sabe que la mayoría de ellos solamente en la cancha tiene algo que decir.

Ante diversos micrófonos, se han escuchado frases tan "geniales" como las siguientes:
 
- "Nuestro futbol sigue siendo subreal".

- "Éste fue muy antiguo muchos años".

- "Ha sido una de las satisfacciones más desagradables en mi carrera como futbolista".

- "Tenemos que jugar con más ganas, con más añico".

- "Nadie creíamos en ellos".

- "Habemos varios que pensamos así".

- "Si lo forzas, puede romperse".

- "Los Tigres se regordearon con el rival".

- "En este estadio, cuando hay sol pasa mucho el calor".

- "Adentro dice una cosa, y después cuando sale afuera dice otra".

- "Los 32 equipos están acomodados en cuatro biombos de ocho cada uno".

- "Es que al momento de disparar se le había pasado el momento en que debía haber disparado".

- "Es un equipo que carece de falta de identidad".

- "Como puede llover, por favor llévense al estadio algún impermeabilizante".

- "Ese primer gol nos cayó como un balde de agua caliente".

- "Él no debe buscar el desborde, porque no es tan ducto en eso".

Y ustedes, estimados lectores... ¿cómo qué dislates han escuchado últimamente?

 
Twitter: @rgomezjunco