Hoy en día ya no es sorpresa que cada vez jugadores mas jóvenes estén preparados para ganar en el PGA Tour. Ese estereotipo que existió del golfista durante muchos de que era barrigón y que para jugar golf no se necesitaba tener condición física, ya ha quedado en el pasado.

Este fin de semana quedó más que demostrado con uno de los finales más emocionantes de la temporada en el 3M Open. El último grupo estaba conformado por el novato sensación Matthew Wolff, de tan solo 20 años de edad, quien apenas hace un poco más de un mes se llevó el título nacional del NCAA con la Universidad de Oklahoma y quien disputaba apenas su tercer competencia como profesional.

Lo acompañaba su gran amigo, quien a mi parecer es uno de los mejores swings del golf, Colin Morikawa.

Si sumamos la edad de los dos juntos, no se iguala a la de Tiger Woods.

Wolf además es poseedor de un estilo muy particular, hace un pequeño movimiento de piernas antes de empezar el swing y después saca el bastón muy afuera con su backswing, genera un movimiento muy fuerte de caderas y regresa perfectamente en el plano correcto al momento de impactar la bola.

Pues bien, estos dos dieron una cátedra como si se trataran de unos veteranos. En el grupo anterior a ellos, el cuatro veces ganador, Bryson DeChambeau, acababa de meter un putt de tres metros en el último hoyo para ponerse de líder en la casa club.

Wolff observó todo desde el fairway, sabía lo tenía que hacer par para ganar. Con un 5 de fierro dejó la pelota a 12 metros en la orilla del green para de ahí embocar un putt para águila que le daría el triunfo definitivo, el primero de su carrera, y con él tiene todos los privilegios que implica ser ganador en el PGA Tour.

Esto es de gran impulso para el golf mundial, esta generación de golfistas egresados de las Universidades están cada vez más preparados para ganar, los tiempos cambian, y el golf no es la excepción.

 
 
CARLOS ORTIZ EN PLAN ESTELAR
 
 
Nuestro compatriota Carlos Ortiz tuvo su mejor actuación de la temporada en este mismo torneo. El empate por el quinto lugar le asegura la permanencia para la próxima temporada del PGA Tour.

Carlos se mostró valiente al final de su ronda al terminar con tres birdies en los últimos cuatro hoyos para una ronda de 64 golpes. Cada vez se le nota más maduro, se le ha visto una gran mejoría después del US Open. De seguir así, seguramente tendremos muchas más noticias de Carlos en el futuro.

Meritorios resultados los de Abraham Ancer al terminar en el puesto 19 en el Abierto de Irlanda, y la consistencia de Gaby Lopez sigue dando frutos al terminar en el decimoquinto puesto del Thornberry Creek Classic, de la LPGA.

 
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