Arranca la Eurocopa de Francia en medio de las medidas de seguridad más importantes de su historia.

Los datos generales de las 24 Selecciones permiten, por ejemplo, distinguir al equipo más alto (Suecia), al más pesado (Alemania), al más delgado (Italia), al más joven (Inglaterra) o al más longevo (Irlanda).

Pero también permiten descubrir historias como la del portero húngaro Gabor Kiraly, a quien le corresponde el honor de ser el más viejo en la cancha, no solamente en esta edición sino en toda la historia de la competencia.

Con 40 años supera el registro del alemán Lothar Matthaus, hasta ahora el más veterano en jugar con 39 años y 91 días, en la Euro 2000. Y a otros cancerberos como el danés Morten Olsen, 39 años y 308 días, y la leyenda inglesa Peter Shelton, con 38 años y 271 días, quienes así llegaron a la Euro 1988.

Pero lo de Kiraly no es solamente anecdótico ya que fue una de las piezas fundamentales en la clasificación a costa de Noruega en el Repechaje. Lo que significó el regreso a la Fase Final de la Eurocopa, después de tres décadas.

En sus 23 años de carrera como cuidavallas, el húngaro ha pasado por el futbol de la Premier League y el de la Bundesliga. Todo indica que ha dado la vuelta perfecta porque juega ahora donde empezó en 1993, el Haladas de la Liga de Hungría.

Fue justamente en su paso por el Crystal Palace (2004-2007) cuando su imagen jugando con pants grises se volvió icónica. Sin embargo, había empezado a usarlos en 1996. "Un día, cuando aún estaba en el Haladas, no tenía pantalones negros limpios, así que me puse los grises. A partir de ahí encadenamos una racha de ocho o nueve partidos sin perder y conseguimos la permanencia. Desde entonces, han sido mi amuleto de la suerte allá por donde he ido", publicó el portal de la FIFA en 2012.

"Los elijo siempre de una talla más grande para facilitar los movimientos. Lo importante es el resultado, no cómo te ves", dijo en otra entrevista.

¿Qué pensará Cristiano Ronaldo?

El último partido de Hungría en la ronda de grupos será ante Portugal, el miércoles 22. Si Kiraly decide salir de pants será un buen momento para contrastar su modelito con el portugués, especialmente en las jugadas de área.

Fue el 25 de marzo de 1998 cuando en Viena debutó internacionalmente con su Selección un joven portero húngaro de 22 años. En su primera intervención a los 7 minutos atajó un penal al delantero de Austria, Anton Polster. "Fue emocionante escuchar a los fanáticos corear mi nombre", recordó tiempo después.

Quiere ahora la rueda de la fortuna del futbol que el debut de Hungría en Francia 2016, el próximo martes, sea justamente contra los austríacos.

Y ese mismo cuidavallas podría estar bajo los palos.

El tiempo pasa, pero los porteros quedan.

 
 
hfernandez@reforma.com
Twitter: @mundodepelota