Si la Fórmula 1 arrancó de manera emocionante y caótica su temporada 2020 en el GP de Austria, ¿podríamos esperar el mismo nivel de explosividad en las próximas 7 carreras ya calendarizadas?

Con el triunfo del finlandés Valtteri Bottas, de Mercedes, y los inesperados podios de Charles Leclerc, de Ferrari, y de Lando Norris, de McLaren, la máxima categoría arrancó con bombo y platillo su temporada del 70 aniversario y, en tan sólo una semana, volverá a las pistas con el segundo GP del año, lo que mantendrá a tope las expectativas de todos los fanáticos al Gran Circo.

Tras 217 sin una carrera, y una pandemia de Covid-19 que afectó a todo el deporte en el mundo, la máxima categoría ofreció lo que los aficionados al deporte motor esperaban con tanto anhelo: una prueba llena de rebases, penalizaciones, incidentes y un inesperado Top 3 ya que ni el campeón reinante, Lewis Hamilton, ni Max Verstappen ni Sebastian Vettel, estuvieron incluidos.

El drama fue el sello de la casa, con 9 abandonos y tres Safety Cars que apretaron la carrera cada vez que entraban, incidentes con los que pilotos como Norris y Leclerc salieron beneficiados, pero dieron al traste el carrerón del mexicano Sergio Pérez, de Racing Point, quien seguramente mejorará lo hecho ayer en el siguiente GP, el de Estiria, el cual se corre este domingo 12 en la misma pista austriaca.

 
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