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¿Es buena o mala?
José Pablo Coello | 08-08-2017
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Los Delfines de Miami llevan muchos años tratando de salir de la sombra de los Patriotas para volver a ser un equipo relevante en la Conferencia Americana.

A partir de la llegada de Tom Brady a la titularidad de Nueva Inglaterra en 2001, Miami solamente ha conseguido meterse a los Playoffs en tres ocasiones, y no ha podido ganar un solo encuentro en esta fase.

La última victoria de los Delfines en postemporada fue con Jay Fiedler como su mariscal de campo titular y con Dave Wannstedt como entrenador en jefe.

Sin embargo, tras siete años de frustraciones a partir del título divisional conseguido en 2008, aprovechando la lesión que obligó a Tom Brady a perderse toda la campaña, el equipo se metió a la postemporada en el 2016, el primer año de Adam Gase al frente de la institución.

Gase se ganó la confianza de Delfines gracias a su brillante trabajo como coordinador ofensivo con Denver y Chicago, en donde Peyton Manning y Jay Cutler, respectivamente, tuvieron temporadas muy productivas.

Es por ello que había grandes expectativas en torno al rendimiento de Ryan Tannehill de cara a la próxima campaña. Si bien es cierto que no ha terminado de cuajar para convertirse en un jugador de élite, su rendimiento en el 2016 permitía suponer que un año más de trabajo al lado de Gase lo harían seguir mejorando para ser un mariscal de campo mucho más confiable y productivo.

La lesión en la rodilla que podría llevar a Tannehill a perderse todo el año, cayó como un balde de agua fría en Miami y obligó a Gase a convencer a Cutler de abandonar el retiro para hacerse cargo de la ofensiva de los Delfines.

Cutler, que en toda su carrera solamente jugó un par de duelos de Playoffs, no dudó en aceptar el reto y dejar su aventura como comentarista con tal de volver a trabajar con Gase.

Se dice que Cutler está en muy buena forma y no debiera tener problemas para mantenerse motivado, además de estar familiarizado con el libro de jugadas de la ofensiva de Miami.

Hay incluso quien piensa que para el propio Adam Gase, la llegada de Cutler significa una mejora con respecto a Ryan Tannehill en la posición mas importante de este deporte.

Aun así, creo que la ausencia de Tannehill representa un duro golpe para los Delfines. Cutler tiene talento, pero es terriblemente irregular, y no creo que tenga la personalidad como para ganarse la confianza del vestidor en el corto plazo.

Si a ésto sumamos que Patriotas es el campeón defensor y se ha reforzado mejor que nadie en la NFL, me parece que Miami se mantendrá al menos un paso atrás de Nueva Inglaterra en la División Este de la Americana.

 
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