El escurridizo azul
 
Me comentaron por ahí que cuando los directores de fuerzas básicas de los equipos de la Liga MX se tomaron la foto oficial en la reunión de trabajo que tuvieron hace unos días en el Centro de Alto Rendimiento, algunos de los asistentes detectaron que uno de sus colegas aprovechó la situación para emprender la graciosa huída.

Resulta que los directores de las básicas hicieron una pausa en su sesión de dos días para atender a los medios informativos en una zona mixta y después se tomaron la foto, en la cual insistió mucho el director de Selecciones, Héctor González Iñárritu.

Sin embargo, cuando ya casi todos posaban para las cámaras, uno de los profesores notó la ausencia de Agustín Manzo, quien iba por parte de Cruz Azul, y se animó a decir: "Creo que ya se nos escapó Agustín Manzo". Varios buscaron por ahí al directivo cementero que, en efecto, no estaba en el lugar ni acudió a la zona mixta... y de pronto uno de ellos rompió la tensión: "De todos modos siempre se hace güey", lo que de inmediato provocó las risas de todo mundo, ayudando de manera casi involuntaria para que las fotos fueran memorables, pues no había nadie que estuviera a fuerza entre los entrenadores.

La cosa es que después de la foto los trabajos siguieron en el auditorio del CAR, pero el que no regresó nunca fue Manzo... ¿a dónde se habrá ido?

 
 
Vestidos y alborotados
 
Me cuentan por ahí que cuando la directiva de Pumas anunció la contratación de Guillermo Vázquez a finales de agosto, los primeros en brincar de felicidad fueron los jugadores más jóvenes, alegría que fue cortada de tajo.

Muchos de los chavos del club que hacían sus pininos en el primer equipo ya se veían jugando grandes cantidades de minutos en el Apertura 2014, ilusión que construyeron al echar un vistazo a la anterior etapa de Memo como timonel auriazul, cuando apostó claramente por la sangre fresca, debutando chavos a diestra y siniestra.

Pero vaaaya desilusión la que se llevaron muchos canteranos cuando el técnico decidió, por la penosísima situación en la que tomó al equipo, que los veteranos serían los encargados de enderezar el barco.

Tremenda sorpresa se llevaron muchos jóvenes que ya entrenaban con el primer equipo por decisión de José Luis Trejo, cuando Memo me los retachó a la Sub 20 con la idea de que se mantuvieran en forma para estar al centavo en caso de ser necesitados.

De tal suerte, a los novatos no les quedó de otra más que apretar los dientes y respetar las decisión del entrenador, quien quizá para el Clausura 2015, con una situación tal vez más tranquila, pueda volver a sus raíces y entonces sí darle la chance a la cantera de resurgir como se merece.

 
san.cadilla@reforma.com