La Eurocopa arrojará hoy a su primer finalista, y mañana al otro.
Hoy, el ganador del duelo entre los representativos de Portugal y de País de Gales se convertirá en el finalista sorpresivo, inesperado.
Y mañana, en una auténtica "Final adelantada", los conjuntos de Francia y de Alemania dirimirán cuál es el otro finalista y muy probablemente próximo campeón de Europa.
Porque en este torneo, como pocas veces había sucedido, fue contrastante la diferencia entre los caminos recorridos y el futbol exhibido por cada uno de estos cuatro semifinalistas.
El cuadro portugués, con cinco partidos en los que no ganó ni perdió durante los 90 minutos, y en dos de los cuales (por lo menos) fue superado por el adversario en el futbol desplegado.
Los galeses, con enormes méritos alcanzados sobre todo en su reciente actuación ante Bélgica, pero vencidos por los ingleses en la Fase de Grupos y sin haber enfrentado (como tampoco lo ha hecho Portugal) a ninguna de las verdaderas potencias.
Los anfitriones franceses, con un camino allanado y superando con claridad, aunque no siempre con holgura en el marcador, a cada uno de sus cinco rivales.
Y la Selección de Alemania también siendo superior a sus cinco contrincantes, pero teniendo entre ellos a un conjunto italiano a cuyo nivel no se acercó siquiera ninguno de los oponentes de los otros tres semifinalistas.
Si para llegar a la Final los cuatro abrigan similares probabilidades, cercanas al 50 %, para ser campeón los números cambian y parecen estar alrededor del 40 % tanto para la escuadra de Francia como para la de Alemania, y por ahí del 10 para la de Portugal y para la de Gales.
Más allá de esas probabilidades, veremos si hoy y mañana surgen finalistas merecidos, convincentes, brillantes... o solamente "reglamentarios".
Y veremos después, también, qué tan capaz es el que gane hoy de competirle el domingo al que gane mañana.
Twitter: @rgomezjunco gomezjunco@reforma.com |