FUSIÓN ANTICIPADA
 
 
Podrán decir que soy adivino, pero la verdad es que más bien me gusta buscar información por todos lados para ustedes y nuevamente las cosas sucedieron como bien se las anticipé.

El pasado 19 de junio, tras platicar un buen rato con uno de mis juditas, me anticipó lo que ya vimos en la tele desde el sábado pasado: pudo más la desesperación por bajos ratings que la rivalidad entre televisoras.

Desde aquel miércoles les conté que Adriana Monsalve y Toño de Valdés por Televisa y Rodolfo Vargas e Inés Sainz por TV Azteca se sentaron para negociar los términos de una fusión con la idea de hacer un programa compartido para atraer a las audiencias, pues el temor de tener pérdidas de lana por el piterísimo torneo en Estados Unidos era real, muy real.

Al final, en la fórmula entró también ESPN y un día antes los comentaristas de las tres cadenas cacarearon en redes sociales el proyecto que ya habían presentado en el Mundial de Rusia.

Pues bien, el sábado al programa le tocó entrar tarde por culpa de los tiempos extra y los penales en el juego del Tri ante Costa Rica, pero los que no le apagaron después del drama pudieron ver la primera emisión de "Por el futbol somos brothers", que se estrenó con Inés y Adriana en primer plano, acompañadas por Zague (Azteca), Marc Crosas (Televisa), Héctor Huerta (ESPN), y Ricardo Puig (ESPN). El valiente que le entró a patrocinar el programa fue Tecate y serán 6 ediciones.

Quien se sorprendió con el programa no se informa como debe.

Se los advertí y así fue.

Una vez más.

 
 
TODO EL PODER
 
 
Este fin de semana, aprovechando que el Tri jugaba hasta el sábado en la noche, me fui a desayunar con mi Judas Celeste allá a los modestos restaurancitos de Artz y parece que andaba ansioso por contarme cosas, pues no nos servían todavía el café cuando se arrancó.

"Tengo buena info de Peláez, mi SanCa", me dijo.

"Nomás no me lo vayas a crucificar sin razones, porque el buen Richard es cuate y buena onda", le contesté.

"No, para nada, pero está bueno lo que te cuento", reviró.

"Pues a ver, arráncate en cuanto nos sirvan el americano".

Ya servido el café, mi judas maquinista me dijo que Ricardo Peláez Linares, director deportivo de Cruz Azul, está agarrando cada vez más poder en La Noria, pues luego de que movieron al eterno Carlos Villar de la dirección del Departamento de Comunicación del club y lo instalaron como encargado del área de Relaciones Públicas, el buen Peláez no se tardó ni 5 segundos en moverle por aquí y por allá para colocar en el viejo puesto de Charly Villar a alguien de sus enteras confianzas (El nombre yo ya lo sé, pero los voy a mantener en ascuas unos días más).

Dirán los malpensados ¿y eso qué rayos tiene de poder? Ahhhhh, bueno, déjenme les platico que a mi buen Richard le fascina controlar todo lo que tiene que ver con su club y eso incluye el manejo de los medios. Así lo hizo en el Ame, donde el amigo que llevaba prensa no hacía nada sin la palomita de Peláez y pues ahora busca emular ese estilo también en Cruz Azul.

A tal grado está la cosa que mi judas me dijo que Ricardo ya hasta pidió que la oficina del nuevo director del Departamento de Comunicación quede pegadita a la suya.

En cierto sentido no es malo que Richard haga esto, pues así como es para agarrar cosas, también lo es para responsabilizarse de ellas, por lo que cuando ponga orden en los canales oficiales del club se dará cuenta, por ejemplo, que la cuenta de Twitter tiene bloqueado hasta al Papa Francisco...

"Ahhhhh, pero esta es la parte buena, SanCa, te tengo más..."
 
"¡Venga!"
 
 
LA CANCHA DE MIS PESADILLAS
 
 
Donde no le está yendo naaada bien a Ricardo Peláez es con la cancha 1 de La Noria, que sigue hecha un desastre.

El buen Richard propuso desde el inicio instalar el mismo pasto híbrido que se puso en el Estadio Azteca el año pasado con la lógica y plausible idea de tener contacto con una superficie igualita a la que los Cementeros pisarían para competir cada 15 días como locales.

El problema fue que cuando se destapó el fiasco del pasto híbrido que provocó la cancelación del juego de la NFL de noviembre, Peláez se aferró a mantener la cancha de La Noria pese a que en el Estadio Azteca poco a poco fueron dándose cuenta de que era un fraude para finalmente decidirse a quitarla y volver al sacrosanto pasto tal y cual Dios lo creó.

Por más que han tratado de rehabilitar las partes dañadas del campo cementero, nomás no queda y lo que me dijo mi judas celeste es que en plena época de gastar lana en refuerzos y pretemporadas, Peláez no tiene muchas intenciones de decirle a su patrón que el pasto híbrido ha sido un fracaso, pues sabe que a Guillermo Álvarez no le hará ninguna gracia saber que hay que cambiar otra vez la cancha, con todo y que nuca estuvo tan fregada como la del Coloso de Santa Úrsula.

De tal suerte, todo indica que mientras son peras o son manzanas, la Cancha 1 de La Noria se va a quedar como está y ya será chamba de Pedro Caixinha que sus muchachos queden a punto para el Apertura 2019 con todo y ese "detallito"...

 
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