foto
La era del individuo
Aldo Farías | 27-08-2020
en CANCHA
compartir por:
La salida de Leo Messi del Barcelona es una de tantas pruebas de que estamos viviendo la era del individuo.

Es una realidad, mucha gente está cansada de las instituciones y esa es la razón por la cual buscan instituciones con líderes visibles, o terminan identificándose con simples humanos en redes sociales.

Es normal que las grandes compañías estén batallando para adaptarse a las nuevas generaciones que, en su búsqueda de identificación, requieren de la imperfección para gancharse con algo.

Precisamente la imperfección es una característica humana, así que si no se van a atrever a que su marca tenga comportamientos humanos cómo equivocarse genuinamente o asumir posturas, lo que pueden hacer es tener directores, dueños o presidentes expuestos a la opinión pública.

Elon Musk con Tesla, Dana White con la UFC, Steve Jobs con Apple y Jeff Bezos con Amazon son ejemplos claros.

En la política también sucede; la gente está tan cansada de los partidos políticos que sus personajes han adquirido un peso sin precedentes; Trump en imagen es más que el partido Republicano, como Obama en el Demócrata, o AMLO y Calderón con sus respectivas asociaciones.

Entonces, si los humanos están ganando elecciones y no los partidos políticos, por qué no sucedería lo mismo en el terreno deportivo.

Lo que hemos vivido en los últimos días con el caso Messi es muy parecido a lo que hemos vivido cuando astros como LeBron James o Tom Brady han cambiado de equipo, en la NBA y NFL respectivamente.

En México, guardando toda proporción, el caso más parecido que encontramos es el de André-pierre Gignac, quien con su gran personalidad por momentos parece eclipsar a Tigres.

Tal vez es el momento de olvidarnos de aquella famosa frase que dice "nadie está por encima de la institución", ¿o no?

Estoy convencido que para que esta nueva relación entre institución y humano pueda funcionar necesita tener la colaboración de ambas partes.

O sea, que el status ideal para los tiempos es ser institucional hacia adentro, pero independiente hacia afuera.

Esto pudiera tomarse como una contradicción ideológica, pero en este caso no es así. Se trata de equilibrar los poderes asegurándose que tanto el personaje como la institución se valoran mutuamente y que aunque los métodos puedan cruzarse, ambas partes busquen llegar al mismo fin colectivo.

Para los verdaderos barcelonistas, debe ser un trago amargo que pasará con el tiempo, pero para los fans casuales, que son la mayoría, vendrá un crisis de identidad en la que seguramente comenzarán a consumir menos del Barsa.

Qué difícil será vender al Barcelona por el mundo sin Messi.

 
Twitter: @AldoFariasGzz
 
 
 
 
compartir por:
Resumen Noticioso
¿Quieres recibir en tu e-mail la columna editorial de Aldo Farías?
1 mes2 meses3 meses
Ultimas columnas
Televisoras al rescate
24-08-2020
Fans
20-08-2020
Pokar de ...
17-08-2020
El jugador completo
13-08-2020
La bala de Peláez
10-08-2020
La que más dolió
06-08-2020
La nueva localía
03-08-2020
La integración futbolística de Norteamérica
30-07-2020
Tiempos de cambio
27-07-2020
Liga Covid MX
23-07-2020
El 'Vasco' de México
20-07-2020
Semifinales entre grandes
16-07-2020
Gignac, el ejemplo que los mata
13-07-2020
Nuevos Pumas
09-07-2020
Falsas jerarquías
06-07-2020
La Burbuja
02-07-2020
Liga de Expansión
29-06-2020
Sí a las barras
25-06-2020
Otras columnas
San Cadilla
SAN CADILLA
Francisco Javier González
¿Y qué hago con mi camiseta?
Francisco Chiu
Racismo y NBA
El Rompehuesos
Entre empresas te veas
Toño Monroy
TRIBUNA ABIERTA