Esta semana 6 nos ha traído varios acontecimientos inesperados, arrancando con la aplastante victoria de Atlanta sobre Minnesota.
¿Quién hubiera pensado que los Falcons -que en los últimos días perdieron a su head coach y a su gerente general, que no habían ganado un solo partido, que tuvieron que interrumpir su preparación para este juego al tener que cerrar sus instalaciones por un brote de Covid-19- le fueran a pegar de visita una arrastrada a los Vikings? A pesar del mal récord de los locales, llevaban tres semanas al hilo mostrando grandes actuaciones, al grado de poner contra las cuerdas a Russell Wilson y sus Seahawks apenas hace ocho días.
¿Quién tenía contemplado que los Broncos de Denver se meterían a Foxborough a vencer a los Patriots, que además contarían con los rehabilitados de Covid-19, Cam Newton y Stephon Gilmore?
¿Quién vio venir que los Bengals, en el segundo cuarto, tendrían contra la pared a los Colts con un marcador de 24 a 7? Philip Rivers acabó dando un juegazo y apenas pudo sacar de la barranca a su equipo.
A cualquiera le asombró que Filadelfia se quedará a sólo una conversión de dos puntos para mandar su partido en contra de los Ravens a tiempo extra, o que para el medio tiempo los Niners le estuvieran pegando 21 a 7 a los Rams.
Pero la sorpresa del domingo no fue necesariamente la derrota de los Packers, sino la manera en la que se alzaron con la victoria los Buccaneers: qué manera de secar a Aaron Rodgers, de pasarle por encima a su defensiva, con todo y Rob Gronkowski, que "no andaba muerto, andaba de parranda".
Pero no todo fue sorpresa. Los Steelers ganaron por décimo séptima ocasión consecutiva en Heinz Field a los Browns. El récord de "Big Ben" en contra de Cleveland lo dice todo: 24 ganados 2 perdidos y 1 empatado.
Los Jets no le ganan a nadie y menos si dependen de Joe Flacco y Frank Gore, cuyos mejores tiempos fueron hace mucho.
Era muy predecible que los Lions le ganaran a los Jaguars, que el partido de los Panthers en contra de los Bears estuviera parejo, pero que Chicago siguiera consistente en obtener la victoria y que los Giants sacaran su primer triunfo.
El mejor partido del día fue el Titans contra Texans. Como lo comenté en el Podcast de Cuarta y Gol, Houston le sacó un grandísimo susto a los locales, de hecho el marcador final no demuestra lo parejo que estuvo el encuentro, mismo que recomiendo ampliamente volver a ver.
Doble cartelera tendremos el día de hoy: los Chiefs que buscarán vengar en Búfalo la dolorosa derrota que les propinaron los Raiders la semana pasada y los Cowboys, que ahora de la mano de Andy Dalton recibirán a los Cardinals.
Ambos partidos, pronostico, serán de altísimo puntaje; mentalmente llegan más fuertes los de Kansas e impondrán su jerarquía de campeones y los Cowboys en otro juego dramático sacarán una importantísima y necesaria victoria moral estrenando nuevo capitán en su ofensiva.
Para poder profundizar y extendernos me encantaría platicar con todos ustedes este próximo domingo en el Café Americano a las 11 a. m. en los lives de Facebook e Instagram de Cuarta y Gol.
Twitter: @CuartayGol |