Tigres debe entender que el proceso por el que pasa implica una evolución, una reinvención.

Sobre todo cuando se viene de un proceso tan largo, pero hay que recalcar que es ahí donde ha encontrado la fórmula de éxito, en la que se engloba a todos, desde directiva, cuerpo técnico, jugadores y afición. Todo en la vida después de un tiempo se vuelve ciclado, aun cuando da resultados, debe haber reinvención.

La etapa por la que pasa el club se vuelve trascendental si se busca seguir peleando por todo lo que se compita. Cada quien desde su trinchera, directivos buscando una mejor planeación, cuerpo técnico nuevas variantes, jugadores seguir teniendo hambre de triunfo y autoexigencia.

En el futbol quizá lo que menos tenemos es tiempo, y menos en un semestre de doble competición.

Quisimos llegar a un peldaño donde las exigencias son mayúsculas para esta institución, pues se estaría hablando de un fracaso, de un equipo deja atrás su "época dorada".

La "revuelta" debe ser ya, después puede ser demasiado tarde, debe de "cuajar" rápido.

El reto está servido y es obvio, no hay escapatoria. Renovarse o morir, Tigres debe salir avante de esta situación si queremos seguir siendo una institución exitosa, ganadora.

Esto es algo que en México es muy difícil, acá ya lo hemos hecho antes. Si queremos mantenernos ahí, es una responsabilidad de TODOS. Y cada quien debe asumirla como tal.

 
 
Twitter: @emmanuel5acosta