Mucho se habla de los hasta hace 4 años eran intocables, indiscutibles e inamovibles; que si el nacimiento de un hijo, el futuro, lesiones, caprichos, etcétera. ¿Nos podemos dar el lujo de prescindir de los Chicharitos, HH's y Velas? Me parece que, para este verano, sí.

¡Es un llamado a representar al País!, ¡Guardado, Raúl y Ochoa sí vinieron!, ¡hay que estar con el "Tata" desde el inicio del proceso!, también.

En el futbol como en la vida, todo tiene matices, y uno de esos es estar en una región muy atrasada en cuanto a nivel futbolístico. La Copa Oro no representa una motivación o vitrina importante que genere competencia y un desarrollo para los futbolistas con jerarquía que anteponen otras situaciones en lugar de tomarse 3 semanas de competencia adicional. Al final, esta Copa para México quita más si la pierde a lo que le da si la gana.

Ni los jugadores le hacen un favor a la Selección ni México se puede dar el lujo de perder jugadores referentes y de probada calidad en busca de un quinto partido en el Mundial de Qatar. Esta Copa Oro podría ser jugada y ganada con una combinación de jugadores que buscan un lugar como Antuna o Rodríguez y referentes en progreso como Álvarez o Salcedo.

El "Tata" debería considerar estos matices, hacer una planeación estratégica y cambiar el es lo que hay, por es lo que queremos.

 
 
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