En un torneo repleto de desencantos, nadie se ha rebelado como el León.

El equipo de Ambriz ya es inalcanzable al grado que le sobran méritos, sólo falta que la rara lógica que ronda por el futbol ahora haga vencedor a las Chivas sobre este súper León el sábado, no obstante que uno acarrea cinco derrotas al hilo y el otro lleva 12 victorias en fila.

En este jueguito hay una línea muy delgada que separa el éxito de la decepción (fracaso para los que van a los estadios en busca de la tragedia). En la Liga MX, ese punto de inflexión lo determina el corte de los ocho finalistas.

Y con la inesperada derrota de Xolos en su casa contra Lobos BUAP, más la victoria de Toluca sobre América, la incertidumbre para lo que resta de la fase regular se redujo a una sola plaza.

¿Quién entre Puebla, Tijuana y Toluca será el octavo sobreviviente? Entiendo que el América también está corto de puntos, pero si dentro del cálculo vemos que sus dos últimos rivales son Santos y el cadáver de Veracruz, a las Águilas yo ya les sumé seis puntos más.

De la misma manera, pero en sentido contrario, a Lobos BUAP no le doy posibilidades de sobrevivir cuando sus compromisos son Cruz Azul y Toluca. Igual usted tendrá otras conjeturas.

Y dentro de lo mejor de la jornada, las palmas se las llevó el partidazo Toluca vs. América; 46 tiros entre los dos (19 del local, 27 del visitante), cinco goles, por lo menos otras 10 jugadas de gol, el "suspense" al ver la mímica arbitral del recuadro avisando que el VAR revelaba algo, más lances y más lances en un ambiente inmejorable en la Bombonera. El empate era lo justo, creo yo, aunque aquí la única verdad es el gol, no hay otra.

También se lleva mención honorífica Manuel Sansores del Morelia por sus dos goles y Lucas Zelarayán. Y ni qué decir del Puebla del "Chelís" y Zamogilny, que le asestaron un 3-1 humillante al Guadalajara. Este relevo ha contabilizado 18 puntos de 30 posibles. Salud, "Chelís", salud de corazón.

De cara a la semana, el martes los ojos de todos estarán fijos en Monterrey, por más que los colegas capitalinos digan que esta Final sólo le interesa a los Tigres y Rayados.

El pronóstico es "sin favorito", los dos son potencias, los dos llegan en buen momento y los dos guardaron a sus titulares para el encuentro de ida, condición que de seguro también harán para la vuelta.

¿Si ésta no es la rivalidad más pareja en México, entonces cuál?

Señores, uno ganará, pero la verdadera victoria está en la "no violencia" entre las aficiones. Y como los radicales de ambas tribus no son capaces de estrecharse las manos, ¿hasta qué punto el festejo de unos será provocación para los otros?

La pasión transformada en picadillo. Hagamos conciencia.

PD: El problema no es de quienes aman a sus equipos, sino quienes odian a los rivales.

Lo escrito, escrito está.

 
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