"La edad es algo que no importa, a menos que usted sea un queso".
Luis Buñuel Con el buen paso de los nuestros en el Mundial Sub 17 Chile 2015, la prensa nacional desató un debate por las edades en nuestro futbol.
Desde los espacios televisivos, los críticos empezaron a razonar (ejercicio raro en muchos de ellos, pero así fue): ¿por qué no meten a esos muchachos a jugar ya en la Primera División?
¿Por qué madura tarde el jugador mexicano cuando en otros países debutan a los 18 años máximo?
Y nunca falta el que señala a los invasores extranjeros como los principales usurpadores de las oportunidades.
También existen quienes demandan un cambio en el sistema de competencia para detonar a los jóvenes futbolistas.
Y todo esto sin más sustento que un "yo creo", sin datos o modelos a seguir, donde el común denominador de nuestras voces críticas sigue siendo el peligroso empirismo.
Pero, ¿cuál es la realidad?
De entrada, existen 475 jugadores registrados y, con participación, sólo 432.
De estos, 175 tienen 25 años o menos (40%), 159 entre 26 y 30 años (37 %), 85 entre 31 y 35 años (20%) y 13 mayores de 36 años (3%).
Si la mitad es menor de 27 años, ¿es un indicador dañino o benéfico?
El número en sí refuta el popular discurso de "no le dan oportunidad a los jóvenes".
Puedo entender que para Michael Jackson las edades tiernas eran importantes, pero no comprendo de estos beneficios en el futbol, pero ahí están los jóvenes jugando.
En cuanto a los 142 extranjeros registrados (30% del total), 65 tienen doble nacionalidad, ya sea por naturalización o por ser hijos de padres mexicanos, mientras que los restantes 77 son foráneos.
¿Esto es alto, bajo o peligroso?
En la Liga de España son el 42%, en Alemania el 49%, Italia el 56%, Inglaterra el 68%, Francia el 42%, Portugal el 53%, y el 35% en Holanda.
Sin meternos en coyunturas sobre la calidad de los 142 extranjeros registrados, hagamos un par de cálculos simples.
Si restamos los 142 extranjeros al total de 475 nos da que 333 son los netamente mexicanos y, por lo tanto, material de Selección.
Pero si en el verano se comprobó que no había más de 40 jugadores en la Liga con calidad para armar dos representativos competitivos, tenemos que hay 293 de los nuestros, no aptos para Selección y, difícilmente, titulares en sus equipos.
¿No será éste el segmento que tapa las oportunidades de los jóvenes antes que los extranjeros?
Cada extranjero que hoy exiliemos será remplazado por uno de esos 293 mexicanos que simplemente no son materia ni de Selección "B".
¿O me va a decir usted que por culpa de 15, 25 o 45 futbolistas extranjeros estos 290 mexicanos no tiene un mejor nivel?
PD. "Al final, o eres diferente... o eres barato". Guy Kawasaki, Gurú en tecnologías y marketing.
Lo escrito, escrito está.
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