¡QUÉ FEOS MODOS!

A veces uno no entiende los criterios que tiene la bendita Liga BBVA a la hora de lanzar el sorteo para elegir a los jugadores que deben asistir al antidoping posterior a los partidos, pero vaya que se les fue la mano un poco con los sorteados del América.

Andaba yo muy movido el pasado domingo por el Estadio Azteca después de la calabaceada del Ame contra Rayados, que no me fije bien y terminé muy cerca del cuartito ese donde le realizan el examen a los jugadores.

De repente que me topo con el señor Emanuel Aguilera y Renato Ibarra, que en ropa de juego y sandalias se tiraron un buen rato esperando a que les realizaran los estudios, hasta ahí todo bien, de no ser porque ambos estaban destrozados después de la derrota.

Nomás de acordarme del buen Ema se me hace un nudo en la garganta. Al argentino hasta le costaba abrir los ojos de tan hinchados que los traía luego de tanta lágrima tras la derrota de las Águilas y aún así tuvo que guardar líquidos para el bendito antidoping.

Y el pobre Renato, que no podía ni caminar con la lesión muscular que trae, hasta me lo pusieron a subir escaleras, después de que al minuto 28 dejó la cancha porque ya no podía ni con su alma.

Ojalá para la otra la Liga elija, no sé, a Nicolás Castillo, que además de fallar penales, pelearse en Instagram, en una de esas también sale bueno para las pruebas de antidoping.

 
 
DESPRECIARON AL DT CAMPEÓN
 
Sí señores, el candidato del ex presidente deportivo de Cruz Azul, Ricardo Peláez, para relevar en su momento Pedro Caixinha es campeón del futbol mexicano.

No sé si se acuerden, pero a principios de septiembre pasado, el portugués salió de la Noria por el irregular paso del equipo y el encargado de seleccionar a su sucesor era Peláez, quien tenía en la mano Antonio Mohamed, con quien ya había trabajado.

Ahhh, pero llegó Víctor Garcés y puso a Robert Siboldi sin hablarlo con Peláez ni "Billy" Álvarez, lo que acarreó la renuncia el ex futbolista.

Bueno, pues me contaron que más de uno se llevó las manos a la cara cuando el "Turco" levantó a Rayados en menos tiempo de lo que tuvo Siboldi, y ya se imaginarán cómo acabaron cuando la Pandilla terminó con 9 años de sequía (una pequeñez en comparación a la mala racha celeste) nada más y nada menos que contra el América, rival que les ha arrebatado dos títulos en ese periodo.

Y es que sé que muchos, hasta Guillermo Álvarez que le rogó a Peláez, eran muy afines a su proyecto, por lo que les cayó como balde de agua fría el título rayado.

 
 
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